NACIÓN
Investigación en curso: ¿Catalina Ortiz será procesada por denuncia falsa y supuesto montaje?
La precandidata a la Alcaldía de Cali dijo en Vicky en Semana sentir que le pusieron una trampa a su campaña política.
Personalidades de la política, ciudadanía e internautas rechazaron el montaje de la falsa agresión que sufrió la precandidata a la Alcaldía de Cali, Catalina Ortiz.
Lo que se mostró como un violento acto machista, resultó siendo una farsa, dado que el ataque fue producto de un performance que organizó una de las integrantes de la campaña política.
Al parecer, todo se orquestó a espaldas de Ortiz y solo se enteró de la verdad en la noche del miércoles: “No conocía que lo acontecido fuera una puesta en escena”, contó la mujer en su cuenta de Twitter.
Esta es la verdad del video de Catalina Ortiz, gracias a todos los que defendieron el performance que evidencia lo que sufrimos las mujeres todos los días en la calle. ¡No seguirá pasando! 😵💫 pic.twitter.com/peQ733bCO7
— así es isa! (@LaNegraVikinga) June 1, 2023
De acuerdo con la versión de Catalina, una persona que se hace llamar en redes sociales como La Negra Vikinga planeó el suceso en medio de su estallada creatividad. Ella fue despedida de la campaña cuando reconoció la farsa.
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En el video en cuestión, se muestra que Ortiz había salido a las calles para dar a conocer sus propuestas de cara a la Alcaldía. Sin embargo, en un punto se encontró con un ciudadano en un carro que la atacó con comentarios machistas y misóginos. Ella intentó continuar como si nada, pero los gritos e improperios del hombre continuaban, a tal punto que le echó agua para alejarla.
“La mujer tiene que estar en la casa”, fue uno de los mensajes que el hombre le dijo a la precandidata. El hecho generó un gran rechazo en la opinión pública, pero algunos internautas encontraron fallos en el video, principalmente en los protagonistas de la agresión. Al final, toda la situación se trató de un montaje.
La prueba fidedigna para corroborar que el metraje fue actuado fue la que expuso el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, al indicar que el hombre que agredió verbalmente se trata de Fernando Palechor, un actor de una agencia de publicidad llamada Mulatos. Además, al atar cabos, se encontró que la directora creativa de la agencia, Isa La Negra Vikinga, es cercana a Ortiz y ya había trabajado con ella.
Entretanto, en Vicky en Semana, Ortiz recalcó que esa no es su manera de hacer política. Lo primero que dijo la precandidata a la Alcaldía de Cali es que el ejercicio de repartir volantes lo hace todos los días.
“Pregunté al equipo quién tenía otras imágenes de lo que había sucedido y, después de una avalancha de solidaridad, empezó el tema de que esto podría ser un montaje”, manifestó Ortiz.
Luego de esto, de acuerdo con Ortiz, le confesaron que, efectivamente, se trató de un performance por parte de algunos miembros de su campaña política. “Me enojé mucho. Les dije que no podían seguir trabajando conmigo. (...) Jamás en la vida me habían dicho tantas veces mentirosa”, reflexionó.
En efecto, la situación se convirtió en una polémica que, pese a que la precandidata a la Alcaldía de Cali detalló que no sabía, tuvo que poner la cara, en especial porque se trató de su campaña política.
Igualmente, Catalina indicó que empezó a tener la sensación “como si nos hubieran puesto una trampa en esto porque fue muy raro que yo no estuviera enterada, que se demoraran tres días en decirme, que salieran unos a ofrecer recompensas. (...) Todo me parece un poco raro”, aseguró a Vicky en Semana mientras iba en camino a la Fiscalía a retirar su denuncia de discriminación.
Ahora, este escándalo podría traerle consecuencias jurídicas, no solo a ella, sino a todos los involucrados en la bochornosa escena. Esta situación se presenta ya que la Fiscalía General de la Nación ya había abierto una investigación para esclarecer este hecho. Incluso, dar con el paradero del vehículo y el supuesto agresor.
En conclusión, lo dicho en el artículo 435 del Código Penal que detalla el delito de falsa denuncia, podría darles a los involucrados una pena de 16 a 36 meses de prisión, y una multa que va desde los 2,66 a los 15 salarios mínimos legales vigentes (SMLV). Será la justicia la que determinará lo que procederá con este caso.