Valle del Cauca
Masacre en Pradera, Valle: tres personas fueron asesinadas; en sus cuerpos dejaron misteriosos mensajes
El crimen fue perpetrado en una zona disputada por grupos armados ilegales. Las víctimas aún no han sido identificadas.

Una nueva masacre estremece al Valle del Cauca. Tres personas —dos hombres y una mujer— fueron asesinadas con armas de fuego el pasado jueves 12 de junio en la vía que conduce del corregimiento de Potrerito a La Feria, en la zona rural del municipio de Pradera. Las víctimas se movilizaban en un vehículo particular y, según las primeras versiones, sus cuerpos fueron hallados con mensajes amenazantes atribuidos al Frente 57 Adán Izquierdo de las disidencias de las Farc.
De acuerdo con el informe divulgado por el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), los hechos configuran la masacre número 31 en Colombia durante el año 2025, y se enmarcan en un contexto de consolidación territorial y disputa armada entre estructuras criminales que operan en el suroccidente del país.
La Defensoría del Pueblo, por su parte, alertó que este crimen se produce en un escenario de riesgo alto identificado por la Alerta Temprana 002/25, que advierte sobre la presencia y confrontación de al menos dos grupos armados ilegales en la zona: el Frente Dagoberto Ramos y el Frente Adán Izquierdo, ambos pertenecientes al autodenominado Bloque Occidental del Estado Mayor Central (EMC), así como la Segunda Marquetalia y otras bandas locales.
“La imposición de normas y otras formas de control social por parte de estos grupos representa una amenaza constante a los derechos fundamentales de la población”, señaló el organismo en su comunicado.
Hasta el momento, las autoridades no han revelado la identidad de las víctimas ni detalles sobre los móviles del crimen. Sin embargo, fuentes locales indican que los cuerpos presentaban signos de violencia extrema y fueron dejados en la vía con mensajes intimidatorios, lo que refuerza la hipótesis de un ajuste de cuentas o castigo por parte de los grupos armados ilegales.
La zona, que pertenece a la jurisdicción de la Tercera División del Ejército Nacional, ha sido priorizada en operativos de control territorial y presencia institucional, sin que hasta ahora se haya logrado desarticular completamente las estructuras criminales que dominan el corredor rural entre Pradera, Florida y Palmira.
Líderes sociales y organizaciones defensoras de derechos humanos han denunciado el abandono estatal en esta región y exigen al Gobierno Nacional acciones urgentes para proteger a las comunidades campesinas, muchas de las cuales viven bajo amenazas, extorsión y confinamiento forzado.
La Fiscalía General de la Nación y la Policía Judicial adelantan las investigaciones correspondientes para esclarecer los hechos y dar con los responsables de esta nueva tragedia que enluta al suroccidente colombiano.