Nación
Secuestradores de Lyan Hortúa no querían dinero: revelan lo que pedían en verdad para liberar al niño
El personero de Cali entregó nuevos detalles del caso y explicó cómo se dio todo.

Lyan José Hortúa, el niño de 11 años que fue secuestrado en su casa en Jamundí, Valle del Cauca, finalmente fue liberado el pasado miércoles 21 de mayo, después de estar 19 días en poder de los delincuentes.
Con el pasar de las horas, poco a poco se han ido conociendo nuevos detalles de cómo se dio todo. Asimismo, SEMANA reveló en exclusiva lo que hay detrás del secuestro del pequeño, quien tal parece que terminó involucrado en medio de una millonaria deuda que tendría su familia con narcos. Gerardo Mendoza, personero de la ciudad de Cali, habló recientemente con la emisora Blu Radio y contó un detalle que hasta el momento no se conocía: un supuesto canje que plantearon los captores de Lyan.

El funcionario precisó que en su momento tuvo contacto directo con la Defensoría del Pueblo y esta le indicó que desconocía por completo la versión sobre una supuesta entrega de dinero para la liberación.
“El defensor regional me afirma que desconoció por completo una entrega de dinero y me puso de presente que la entrega fue a través de una mesa campesina en zona alta del municipio de Jamundí”, comentó.
El personero reiteró que “ninguno de los organismos que integramos el Ministerio Público estuvimos enterados de que mediara un aspecto que fuera más allá de la entrega sin condicionamiento alguno”.
Mendoza reveló que, en un principio, mucho antes del pago del dinero, se estaba pidiendo un canje para que Lyan fuera liberado y a cambio se entregara a su padrastro, Joshua Suárez, o a su mamá, Angie Bonilla.

“Me opuse y rotundamente dije que no estaba de acuerdo con un canje. Si el grupo al margen de la ley reconoce que fue un error y que Lyan no era el objetivo, pues que simplemente remienden el error liberándolo”, señaló.
El funcionario reiteró que esa fue la exigencia que desde un principio tuvo como personero de Cali. “Desde ese momento, no conocí más aspectos de fondo”, manifestó.
“No se puede perpetrar la criminalidad aceptando un canje porque delito no se canjea por delito. No deja de ser un delito que liberen a Lyan y retengan a otra persona, por lo que me opuse rotundamente”, insistió.
Gerardo Mendoza confirmó que la propuesta era intercambiar a Lyan por la mamá o el padrastro. De hecho, las investigaciones —hasta el momento— apuntan a que este último era el verdadero objetivo de los delincuentes.
“Iban por los adultos, en ningún momento el niño era el objetivo del secuestro, por eso fue que admitieron el error. Cuando reconocen esto, como personero yo reclamo y digo que el error se enmienda liberando a Lyan, esa era mi exigencia”, sostuvo.
El personero reiteró que pese a que en muchas oportunidades estuvo pendiente del caso, nunca tuvo conocimiento alguno acerca de que se pensara pagar un dinero para la entrega del pequeño.
Por el momento, las autoridades se encuentran adelantando las respectivas investigaciones para esclarecer todo lo que hay detrás de este secuestro, que generó indignación y rechazo en todo el país.