Catatumbo

Con caravana humanitaria buscan frenar la escalada de violencia en el Catatumbo; piden al ELN no atacar más

La caravana humanitaria tiene el apoyo de diversas organizaciones sociales y organismos internacionales que sesionaron en el municipio de El Tarra.

6 de febrero de 2025, 1:04 a. m.
Esta medida forma parte de los esfuerzos por mitigar los efectos de la violencia, que ha afectado a las comunidades del Catatumbo
Esta medida forma parte de los esfuerzos por mitigar los efectos de la violencia, que ha afectado a las comunidades del Catatumbo. | Foto: Foto tomada de X: @escomgarzon - @MAPPOEA

Desde el 4 de febrero comenzó la caravana humanitaria en la subregión del Catatumbo, en Norte de Santander, una iniciativa impulsada por organizaciones sociales y apoyada por el Gobierno nacional con el objetivo de poner fin a los enfrentamientos entre los actores armados en la zona, lo que ha generado una grave crisis humanitaria, caracterizada por un alarmante aumento del desplazamiento forzado.

La caravana busca abrir un canal de diálogo y facilitar la ayuda necesaria para los más de 40.000 habitantes que se han visto obligados a abandonar sus hogares debido a la violencia en la región.

Esta medida forma parte de los esfuerzos por mitigar los efectos de la violencia, que ha afectado a las comunidades del Catatumbo, una de las zonas más golpeadas por el conflicto armado en Colombia.

La Gobernación de Norte de Santander confirmó que hay 52.630 desplazados hasta el momento por los enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las Farc en el Catatumbo
La Gobernación de Norte de Santander confirmó que hay 52.630 desplazados hasta el momento por los enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las Farc en el Catatumbo. | Foto: Defensoría del Pueblo

En relación con esta iniciativa, Camilo González Posso, coordinador de la delegación del Gobierno en la Mesa de Diálogos de Paz con el Estado Mayor de los bloques Jorge Suárez Briceño, Gentil Duarte y el frente Raúl Reyes de las Farc-EP, expresó su solidaridad con las familias afectadas.

Pensamos que deben aplicarse mínimos humanitarios que alivien la situación de las comunidades, pero sobre todo propósitos de paz que los acompañen”, dijo el coordinador.

Los campesinos del Catatumbo no pueden regresar a sus fincas o viviendas porque el ELN tomó posesión de las mismas tras causar este desplazamiento masivo.
Los campesinos del Catatumbo no pueden regresar a sus fincas o viviendas porque el ELN tomó posesión de las mismas tras causar este desplazamiento masivo. | Foto: Defensoría del Pueblo

González Posso, quien ha liderado los esfuerzos diplomáticos en la región, destacó la importancia de la caravana humanitaria, señalando que es un paso importante para garantizar que los actores armados cesen sus enfrentamientos y permitan el retorno de la paz y la estabilidad a la zona.

“Esos mínimos humanitarios no solamente son una observancia estricta de las normas del Derecho Internacional Humanitario (DIH), sino que hay que ponerle nombre: respetar la vida, no disparar contra una persona inerme. Que no se repita eso de que se busca a la gente en las casas, y por estar acusados de una adscripción o supuestamente una pertenencia a un grupo adversario, son objeto de fusilamiento, expropiación o desplazamiento”, agregó.

El coordinador también subrayó que el Gobierno está comprometido en brindar apoyo a las víctimas del desplazamiento forzado, destacando la necesidad urgente de una solución duradera para evitar que más familias se vean obligadas a abandonar sus tierras.

Eso tiene que parar. Es muy importante que sobre ese tema se pronuncien las organizaciones armadas sin ninguna ambigüedad, buscando que se abran caminos de reconciliación y de construcción de paz en el Catatumbo y en el país (...) los mínimos humanitarios incluyen una suspensión de toda hostilidad contra la población civil”, detalló González Posso.

Así mismo, enfatizó en que la caravana no solo busca llevar asistencia, sino también generar un espacio de reflexión entre las partes involucradas en el conflicto para abrir el camino hacia la reconciliación y la paz.

“Eso implica la suspensión unilateral por parte de los grupos armados en el territorio de todas las acciones ofensivas que perjudiquen a la población o que signifiquen confrontaciones armadas con consecuencias de muerte y además de impactos en la ciudadanía. Se tiene que garantizar un retorno de la gente a sus actividades y un acompañamiento efectivo de la institucionalidad para que se reconstruya el tejido social, la economía, la inversión. Para que efectivamente el nombre de la paz no sea solamente acuerdos, ni acuerdos por arriba, ni cese de hostilidades, de cese al fuego, sino construcción de paz con la gente, en el territorio, con la gente, en su vida y con apuestas de bienestar”, puntualizó el coordinador.

La caravana humanitaria tiene el apoyo de diversas organizaciones sociales y organismos internacionales que han trabajado de la mano con las autoridades nacionales para garantizar que la ayuda llegue a los más necesitados en el Catatumbo.

A pesar de los retos logísticos y de seguridad, las autoridades siguen comprometidas con el bienestar de la población afectada y con la búsqueda de una solución integral para los problemas de violencia y desplazamiento en la región.