Norte de Santander
Rescataron al padre de la alcaldesa de Sardinata que había sido secuestrado en Norte de Santander
La liberación ocurrió nueve días después de su secuestro, el cual tuvo lugar el pasado 14 de marzo.
En la noche del domingo 23 de marzo, Jesús Montañez, padre de la alcaldesa de Sardinata, Diomara Montañez, fue liberado tras haber sido secuestrado en la zona rural del municipio de Sardinata, en Norte de Santander.
El hombre fue encontrado por las autoridades en una vía cercana al casco urbano del municipio y, tras su rescate, fue trasladado a la ciudad de Cúcuta para someterlo a un chequeo médico y garantizar su bienestar.
La liberación ocurrió nueve días después de su secuestro, el cual tuvo lugar el pasado 14 de marzo, cuando un aparente grupo armado interceptó el vehículo en el que se movilizaba.
“Nos alegra saber que el señor Jesús David Montañez, padre de la alcaldesa de Sardinata, Diomara Montañez, ha regresado al seno de su hogar, es un alivio para su familia, amigos y toda la comunidad que estuvo pendiente de su bienestar. Celebramos su libertad y reiteramos nuestro compromiso con la paz y la seguridad de nuestra región”, detalló el gobernador de Norte de Santander, William Villamizar.
Lo más leído
Aunque aún no se ha confirmado qué grupo ilegal fue responsable del secuestro, se sospecha que podría tratarse de la guerrilla del ELN, ya que esta organización tiene presencia activa en la región.
El hecho se enmarca en el contexto de una grave situación de orden público en Norte de Santander, donde se vive una fuerte confrontación entre el ELN y las disidencias del frente 33 de las Farc. Las autoridades continúan investigando el caso, mientras que la familia de Montañez expresó su alivio tras su regreso y agradeció la labor de las fuerzas de seguridad.
La liberación de Jesús Montañez también resalta las tensiones de seguridad que afectan a la región, marcada por la presencia de grupos armados ilegales y el impacto de su violencia en la población civil.
La confrontación entre dos organizaciones criminales por el control territorial y los negocios relacionados con el narcotráfico ha dejado un saldo de más de 59.000 personas desplazadas y más de 90 víctimas mortales.
Esta grave situación ha llevado al Gobierno a implementar medidas excepcionales, como la declaración de conmoción interior, con el fin de asegurar recursos adicionales para enfrentar la crisis en la región del Catatumbo.
