“No se lo deseo a nadie”: habló el papá de Amaia, pequeña de dos años cuya muerte develó un desgarrador caso de maltrato en Medellín

Con decenas de globos blancos, una multitud dio el último adiós a la pequeña Amaia, la niña de dos años cuya muerte develó un cruel caso de maltrato en Medellín.

Su sepelio fue en el cementerio Campos de Paz, en el sur de la capital antioqueña.

Respecto a lo sucedido, Alexander Montoya Jaramillo, el papá de la pequeña, habló con el medio local Telemedellín.

“Un policía me dijo que lo acompañara, me arrestaron; yo no sabía por qué, estaba confundido, y ya en el CAI me dijeron que no estaba detenido, que era un procedimiento de protección y me iban a hacer una investigación de lo que había pasado”, contó Alexander.

Solo a través de una llamada, dijo el medio local, Alexander se enteró de lo sucedido.

El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, dijo que la pequeña había sufrido golpes y que se había determinado que incluso tenía signos de abuso sexual.

“No solo como alcalde, también como ciudadano y como padre de familia, lo único que quiero es que estos desgraciados paguen y que sean capturados quienes sean los responsables. A nosotros nos duele en el alma lo que les pasa a nuestros niños. En este caso particular, el dolor es muy grande, también se confirma que es un homicidio, que existe también abuso sexual”, señaló en medio de una rueda de prensa.

Al conocer esto, Alexander dijo sentir “un vacío, un desaire que no se lo deseo a nadie, eso es muy duro”.

Además, pidió que el padrastro de la pequeña sea capturado.

“Que se haga una captura lo más pronto posible porque personas así como él no pueden estar en la calle; si la niña fue víctima, puede ser víctima otro niño”, agregó Montoya.

Esto, porque —según se conoció— fue la persona que llevó a la niña a la Unidad Intermedia de San Javier, en el occidente de la ciudad, para que fuera atendida porque supuestamente se había caído.

“La niña fue trasladada al centro asistencial por el padrastro, quien informó que había sufrido una caída. Él estaba al cuidado de ella y de su hermanito de cinco años”, escribió en X el alcalde Gutierrez.

Los profesionales de la Unidad Intermedia de San Javier valoraron la condición en que llegó Amaia, pero no certificaron su muerte como algo natural, lo que significaba que pedían que se investigara para determinar si se trataba de un homicidio.

“Fue valorada por profesionales de la salud, quienes no certificaron la muerte, debido a que presenta múltiples hematomas en diferentes partes del cuerpo”, dijo el alcalde en ese momento.

Según él, el hermanito de la pequeña Amaia, quien tiene cinco años, fue puesto en manos de la Comisaría de Familia de Permanencia para que se le brinde protección.

La pequeña Amaia había sido llevada desde el barrio El Corazón, que queda en límites entre la comuna 13 y el corregimiento de Altavista.