El Ministerio de Transporte y la Superintendencia de Transporte anunciaron este lunes sanciones contra el Centro de Diagnóstico Automotor (CDA) y contra la empresa de transporte por serias irregularidades halladas en la vigilancia y operación del bus que llevaba de regreso a un grupo de estudiantes del Liceo Antioqueño, y que se accidentó a la altura del municipio de Remedios, cobrando la vida de 16 de ellos y del conductor del automotor.

“Realizamos las verificaciones correspondientes a lo ocurrido y encontramos méritos para abrir investigaciones administrativas”, dijo el Superintendente de Transporte, Alfredo Enrique Piñeres Olave.
Por eso, formularon cargos tanto al CDA -Comercializadora Servisuper- como a la empresa Precolombina de Turismo Especializado S.A.S. –Precoltur-, además les suspendieron las licencias de funcionamiento durante seis meses.
“Anunciamos unas sanciones preventivas por seis meses de suspensión a las empresas comercializadora Servisuper, que es un CDA, y a la empresa de transporte Precoltour a partir de los hechos relacionados con el siniestro vial del 14 de diciembre”, aseguró la ministra de Transporte, María Fernanda Gallego.

“Iniciamos además con esto a fondo un plan que se llama Ruta por la vida, una exhaustiva investigación y seguimiento a los CDAs en el país, sabemos que la mayoría cumple con el trabajo para el cual se les ha encomendado, pero hay un porcentaje que está evadiendo la tecnomecánica en un 20 por ciento, hay un porcentaje que no realiza las actividades de revisión a fondo”, señaló la ministra.
En el caso del bus que se accidentó al regreso de la excursión de grados de los estudiantes de la promoción 2025, el Mintransporte encontró que “no cumplió ni siquiera el 20 por ciento de la revisión tecnomecánica y una así le dieron el certificado y circuló”.
“Luego se generaron estos hechos tan complejos, vamos a ir a fondo con las investigaciones, a tomar sanciones, pero sobre todo hacer un plan para evitar que estos siniestros viales ocurran en Colombia”, añadió.

Pero eso no es todo, el Superintendente de Transporte manifestó: “hemos podido evidenciar que la mencionada empresa hizo caso omiso a las recomendaciones correctivas sobre el estado del vehículo accidentado de placas SON847. Todo esto debido al riesgo inminente para los usuarios, no solo los viajeros, sino los peatones y los conductores de otros vehículos”.
Respecto de la revisión técnico mecánica, las autoridades encontraron “inconsistencias en la inspección sensorial, debido a que, el inspector no realiza la toma de medidas de labrado correctamente, no hay revisión exterior del vehículo (rines, llantas, estado de las luces, estado de la carrocería, etc.), no hay revisión interior del vehículo (sillas, salida de emergencia, cinturones de seguridad, etc.). Adicionalmente, presenta ausencia parcial de las cintas reflectivas en la parte trasera del vehículo”, indicaron las autoridades.
Por parte de la empresa, establecieron que “presuntamente incumplió con varias obligaciones, como, presentar e implementar un sistema de comunicación bidireccional entre la empresa y todos los conductores, contar en su organigrama con una estructura de tecnología e Informática, la afiliación a la seguridad social de la totalidad de sus conductores, contar con la normatividad vigente del plan de rodamiento, entre otros”.








