
Opinión
Benedetti, el faro de la “izquierda”, el cambio en reversa
La consulta ratificó lo que dijo Gustavo Petro en el consejo de ministros del 4 de febrero de 2025: que él no es de izquierda y que al mando está Benedetti.
El ganador de la consulta del Pacto Histórico sobre las curules al Congreso fue Pedro Flórez, con el 8 por ciento de la votación, 185.029 votos. Una hechura politiquera de Armando Benedetti, al servicio de su patrón, Euclides Torres, y beneficiario de apoyos clientelistas en Magdalena, Bolívar, Huila, Sucre y en Nariño de su colega conservador, Eduardo Enríquez.
(https://www.lasillavacia.com/silla-nacional/asi-se-inflo-pedro-florez-las-maquinarias-prestadas-del-senador-mas-votado-del-pacto/).
Montó en Puerto Colombia una “casa blanca” al estilo de Aida Merlano, con “mochileros” o acarreadores de votos, refrigerios, computadores, control de cédulas y plata para pagar contra foto. En el Huila, según lo advirtió el director de la ANT departamental, Lester Garrido, varios alcaldes lo apoyaron. El carrusel de promesas que hizo allá fue tal que la rival huilense, Leyla Rincón, –con solo 6.568– lo tildó como otro falso “embajador de la India”.
Lo mismo pasó con Ferney Silva, politiquero del Cauca con la cuarta votación: 90.450 votos. A esa movida clientelista contribuyeron Elías Larrahondo, del Partido de la U; Temístocles Ortega, de Cambio Radical; Luis Fernando Velasco, exministro liberal acusado de comprar congresistas para respaldar proyectos petristas; Francia Márquez con su propia cuota y 17.000 votos del congresista nariñense Erick Velasco. Corearon “caucano vota caucano”.
Tan contaminada estuvo la votación de Laura Ahumada, con 68.940 votos, séptimo puesto, esposa del alcalde de Barrancabermeja, Jonathan Vásquez, quien fue suspendido por la Procuraduría por participar en la campaña de su cónyuge. Están ligados al contratista “bachiller” Jorge Humberto Argüello, mandamás detrás del poder santandereano, y a otro financista, Julián Serrano.
Similar fue el arribo de Patricia Caicedo al sexto lugar, con 74.982 votos. Contó con parte de la maquinaria magdalenense de su hermano Carlos, pero “fue crucial” el director de la ANT, Felipe Harman, donde trabajó como asesora desde mayo de 2024 (El Tiempo, 1/11/2025). Harman le alineó el respaldo de exsubordinados, como la investigada por politiquería Alexandra Pineda en el Cesar, candidata a la Cámara, y de sus ahijados en el Meta, de donde es oriundo, que le dieron a Caicedo la primera votación en dicho departamento.
El resultado de Carlos Benavides, de 77.623 votos, no es ajeno al manejo burocrático. Era el candidato del gobernador de Nariño, Luis A. Escobar (también del Pacto), pero le “ayudaron” socios de varios partidos, alcaldes y diputados, estimulados con la gestión de supuestos proyectos en salud, ambientales, en los POT y en otras áreas.
También ganó el “reseteador” de la política Daniel Quintero. Recicló a Álex Flórez, con 63.995 votos, de más prontuario que hoja de vida, inhabilitado por seis meses por la Procuraduría por actos calumniosos borracho contra la fuerza pública, investigado por violencia intrafamiliar y por contratos “corbata” en el DAGRD de Medellín. Quintero impulsó, asimismo, a su socio valluno Alejandro Ocampo, que trepó de la Cámara al Senado, con 66.439. La incidencia en entidades como la ANT, ISA, UGPP, Ministerio de Justicia, Ministerio de Minas y Energía y hasta en la UNGRD los ayudó.
Estos siete –de los diez más votados– suman 750.000 votos, la tercera parte del total. Al adicionar a Wilson Arias, dueño absoluto del Sena y vuelto barón clientelista, con 171.354 votos (en 2018 no le alcanzó para una curul con solo 15.279 votos), y al boquisucio influencer y contratista Wally, prosélito de Carlos Carrillo, con 137.821, se totaliza el 45 por ciento de los 2.235.000 votos válidos. Enorme disparidad con 92 de los 144 candidatos, que obtuvieron menos de 10.000 votos.
El triunfo de estos nueve Benedettis contrasta con la derrota de personas con trayectoria izquierdista, como Alirio Uribe, íntimo de Iván Cepeda, en el puesto 34; Andrés Camacho, en el 33; Feliciano Valencia, en el 31; Jahel Quiroga, Celio Nieves, Támara Argote, de Jaime Dussán, o de Gabriel Becerra del Partido Comunista (PCC) en Bogotá, noveno en la lista de Cámara con menos de 10.000 votos, sin ninguna opción. El PCC a escala nacional consiguió 35.219 votos con María Eugenia Londoño, de Fecode, que quedó en la cuerda floja. Apenas se salvó Aída Avella, con 50.000 votos.
La consulta ratificó lo que dijo Gustavo Petro en el consejo de ministros del 4 de febrero de 2025: que él no es de izquierda y que al mando está Benedetti y quienes sigan su ejemplo. Así, desechó al sector del PCC de María Eugenia Londoño y Gabriel Becerra, a Támara Argote, Celio Nieves, Jahel Quiroga, Feliciano Valencia, Andrés Camacho y Alirio Uribe, instrumentalizados para aprobar las engañosas reformas del FMI, del Banco Mundial, del BID y la Ocde. Ellos fueron obsecuentes y Petro les metió el cambio en reversa.
