OPINIÓN
Pedagogía y habilidades gerenciales
Una buena técnica para ejercer un liderazgo desde las organizaciones es comenzar a pensar como maestros. Ser vistos como “el profe” y no como “el jefe” es una manera distinta de motivar a los equipos de trabajo. Un análisis de Javier Enrique Delgado, decano de la facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad la Gran Colombia.
No es un secreto que uno de los oficios o vocaciones más importantes en la sociedad es ser maestro: ayudar a moldear una personalidad, como dijera Rodrigo Noguera Laborde, o ser arquitecto de hombres nuevos como lo repetía el gran Julio Cesar García Valencia.
Un maestro tiene la responsabilidad de orientar, liderar, acompañar, construir y a veces hasta encausar las mentes y el espíritu de sus pupilos y en esta labor la pedagogía ha sido la ciencia encargada de plantear permanentemente diferentes métodos y estilos de enseñanza que permitan la mejor manera de acompañar de la mano a los alumnos desde pequeños hasta formarse como buenos ciudadanos.
Hoy en día se entiende mejor que no existe una única inteligencia sino que cada persona desarrolla competencias diferenciales de acuerdo a sus habilidades innatas y a sus capacidades de aprendizaje, esta realidad ya comprobada por diversos estudios (ver Howard Gardner et tales) genera un hermoso reto para los maestros, diseñar espacios y temáticas de formación diferenciales para cada uno de los participantes.
Esta reflexión se me ocurrió mientras terminaba de cursar un diplomado en habilidades gerenciales diseñado e impartido por un reconocido instituto de formación sicológica en España, pensaba que las teorías organizacionales y las metodologías de liderazgo empresarial, si bien habían emanado de los análisis y estudios psicológicos corporativos, no consideraban un componente pedagógico importante. Es cierto que hay una distinción entre pedagogía (educar en la infancia) y andragogía (educar en la adultez), pero también es cierto que cuando se trata de mejorar los ambientes laborales en pro de incrementos en la productividad, pensar “fuera de la caja” y de los cánones conceptuales es siempre una buena decisión.
Se habla de estilos gerenciales, liderazgo, coaching y otros términos que invitan a los administradores a cambiar el enfoque tradicional hacia las tareas o los procesos y enfocarse en las personas. En los últimos tiempos esta ha sido la tendencia en la literatura organizacional del talento humano. Pero ¿Qué tal pensarnos como maestros mientras lideramos las organizaciones? Ser vistos como “el profe” y no como “el jefe” manteniendo con ahínco el prefijo de ambas: la Fe. Ser fuentes de inspiración por nuestros actos, llevar de la mano a nuestros colaboradores pero pensando no solo en las diferencias de personalidad sino en las variaciones y los sesgos cognitivos y culturales de cada uno.
Gerenciar en el siglo XXI requiere dominar habilidades intergeneracionales, proponer e innovar, experimentar y explorar ideas que transformen los espacios de trabajo y crear junto con el equipo un ambiente donde cada uno pueda satisfacer plenamente sus necesidades desde las más básicas hasta las más sublimes. Ser maestro en el trabajo es comprender que cada colaborador siempre quiere, puede y tiene algo que aprender de nosotros, es acercarse a cada uno y generar entornos de confianza y colegaje necesarios para el logro de los objetivos, pero también se trata de reconocer en el otro una fuente de ideas que pueden ser utilizadas para el mejoramiento de todos los procesos, así como en el aula se aprende dialogando y explorando, en la oficina se aprende produciendo, ejerciendo y experimentando en un continuo compartir de ideas.
Quiz final
Mientras usted como gerente o directivo lee estas líneas piense en ¿qué enseñanzas alternativas puede ofrecerle a su equipo? ¿Está preparado para compartir su conocimiento no solo profesional sino de vida? Y sobre todo ¿Qué puede aprender de sus colaboradores?
Saquen una hoja y contesten a conciencia este quiz. La nota positiva se las dará el mercado, cuando encuentren otras formas de liderar su equipo al posicionamiento que siempre han deseado.