RAÚL ÁVILA FORERO

Las empresas más endeudadas del mundo

Dentro del diagnóstico de la salud financiera de una empresa, evaluar la ratio de endeudamiento es un aspecto fundamental para reducir el riesgo financiero. A pesar de esto, en el mundo hay compañías con altos niveles de endeudamiento por mala gestión o por un apetito muy grande de inversión.

Raúl Ávila Forero, Raúl Ávila Forero
30 de diciembre de 2019

Para tener un buen nivel de endeudamiento y garantizar una capacidad de pago, es muy importante reforzar los temas de liquidez. Sin embargo, existen factores exógenos e imprevistos que sacuden día a día al mundo financiero; situaciones para las que muchas compañías no están lo suficiente preparadas y sufren secuelas que pueden durar hasta el mediano plazo de su ciclo productivo.

Dentro de los sectores más afectados está el petrolero. La caída en la producción, escándalos de corrupción y hasta el intervencionismo estatal, en conjunto con los bajos precios del barril, complican mucho el panorama mundial. De hecho, se complica aún más cuando se analiza sólo el panorama en la región latinoamericana, en donde tres compañías del sector están siendo las de mayor envergadura.

La mexicana Pemex, la brasileña Petrobras y la venezolana PDVSA son los gigantes petroleros que están pasando las duras y las maduras los últimos años. Según cifras de Bloomberg, a mediados de 2019 Pemex era la empresa más endeudada del mundo con una deuda de USD$ 104.563 millones. Asimismo, debía para el corte el 97% de sus activos, mientras que Petrobras mantiene una deuda del 41% de sus activos.

Según varios expertos, los factores predominantes que llevaron a empresas como Pemex a esta posición han sido un mal manejo de los gastos de inversión, la fuerte carga fiscal y la ineficiencia operativa. Sin embargo, en casos como el de Petrobras, es más que evidente que el lavadero en que se convirtió la compañía gracias a los sobornos realizados a altos funcionarios de la empresa para conseguir contratos sobrefacturados, fue el toque que sumió a la petrolera. De hecho, es una de las investigaciones más conocidas dentro del portafolio de escándalos de corrupción con los que cuenta la región.

Se estima que entre 2003 y 2014 las petroleras de la región vivieron una época de bonanza por el alto precio del petróleo que se manejaba en los mercados internacionales. No obstante, gran parte de dichos recursos fueron usados por los gobiernos de turnos para rellenar las arcas del Estado sin pensar en lo importante que era aprovechar dichos recursos para invertir en proyectos de largo plazo. Por ende, detrás de esta crisis, la irresponsabilidad de los gobiernos de México, Brasil y Venezuela es absoluta.

Estos derroches sólo culminaron en las actuales caídas en producción y una escasez en los recursos de inversión. Por ende, no es extraño que estas compañías sean un constantes foco en la agenda del gobierno. Por ejemplo, el gobierno de López Obrador ha contemplado para Pemex una reducción de la carga impositiva del 65% al 54% y una inyección de capital que llegará a los USD$ 7.400 millones en aproximadamente 3 años. Pero, infortunadamente, no se sabe si esto baste para rescatarla. 

Pero para sorpresa en pleno cierre de 2019, AT&T se convirtió en la empresa más endeudada del mundo por una gran impulsividad en sus compras. Durante el último año, los directivos de la empresa de telecomunicaciones no dudaron nada en tirar la chequera para expandir sectores prometedores que van mucho más allá del negocio convencional.

Desde hace un buen tiempo, la industria de los contenidos y el streaming vienen pisando fuerte, siendo este el foco de AT&T para diversificar su negocio y atraer mucha más audiencia a través del internet. Por ello, el operador quiere librar una batalla campal a través de HBO Max para ser mucho más competitivo que plataformas como Netflix, Amazon Video, Apple y la más reciente oferta de Disney+.

Con esto, su deuda asciende casi a los USD$ 180.000 millones entre todas sus alternativas de financiación. Cifra que es comparable ampliamente con el PIB combinado entre Ecuador y Bolivia, consecuencia de adquisiciones como DirecTV por USD$ 48.500 millones y fusiones con Time Warner por USD$ 86.000 millones.

De hecho, la esperanza en esta nueva plataforma es creciente. Si bien la compra de Time Warner le ha permitido incorporar cadenas como CNN y TNT, HBO Max le robará a Netflix una de las series más vistas en el mundo: Friends.  Y en paralelo, planea invertir entre USD$ 1.500 millones y USD$ 2.000 para producir contenido propio en los próximos dos años, adicionando también a la programación noticias, deportes en vivo y dibujos animados. 

En total, HBO Max tendrá 1.800 películas con unas 10.000 horas de contenido. Aunque el objetivo es llegar a los 50 millones de suscriptores para 2015, expertos manifiestan que AT&T necesita encontrar el equilibrio adecuado entre precio y contenido para lograr superar a su competencia, dado que plataformas como Netflix y Amazon Video ofrecen sus servicios por el 60% de la tarifa que planea cobrar AT&T por HBO Max.

De igual manera, analistas de Bloomberg recuerdan que AT&T usará los datos de sus clientes para colocar publicidad dirigida, un negocio que mueve una gran suma de dinero año por año. Y dado que los vencimientos de deuda rozan los USD$ 9.200 millones los próximos 12 meses, esta compañía tendrá que poner en marcha todas sus divisiones a pleno rendimiento para evitar vender algunos de sus activos más codiciados.