Alerta roja por plásticos

El plástico de único uso se ha convertido en un producto cotidiano, al punto que su producción ha superado la de cualquier otro material desde los años 50. Diseñados para descartarlos de inmediato, esos materiales hoy representan la mitad de los desechos del mundo, debido a su lenta descomposición natural. Esto abrió el debate sobre prohibirlos.

El Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma), tiene cifras contundentes. Advierten que, de no tomar las medidas adecuadas, para 2050 cerca de 12.000 millones de toneladas de desechos plásticos circularán en vertederos y océanos, lo que afectará la biodiversidad, la economía y la salud.

Las cualidades de este material -ligero y económico- han hecho que la industria plástica aporte de manera significativa al desarrollo de los países. Sin embargo, ha llevado a que su producción alcance cantidades difíciles de controlar. De hecho, de las 9.000 toneladas de plástico que ha producido el mundo, solo 9% ha sido reciclado.

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Lo más preocupante, según el Pnuma, es que su fabricación se duplicará en las próximas décadas y para 2030 llegará a 619 millones de toneladas al año. En la actualidad, América, Japón y la Unión Europea son los mayores fabricantes de desechos plásticos per cápita.

“El mundo necesita urgentemente repensar la manera en que se manufactura, se usa y se maneja el plástico”, señaló el Pnuma.

Regulación local

En Colombia las cifras preocupan. La organización ambientalista Greenpeace señaló que cada ciudadano consume 24 kilos de plástico al año, lo que representa 1’250.000 toneladas para el país. 56% son de uso único y los ríos Magdalena y Amazonas se encuentran entre los 20 más contaminados por este material en el mundo.

En Colombia, cada ciudadano consume 24 kilos de plástico al año

Este escenario muestra la necesidad de reducir el consumo y la producción de este tipo de plásticos -botellas y pitillos-. Por eso, los representantes Harry González y Juan Carlos Losada, del Partido Liberal, promueven un proyecto de ley en el Congreso de la República para cumplir con dicho propósito.

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La iniciativa pasó el primer debate en Comisión Quinta de Cámara, ante las críticas del gremio de productores, Acoplásticos. Esta favorece la regulación, pero advierte sobre las consecuencias negativas en sectores como alimentos, agropecuario, comercio y otros. Esto afectaría potencialmente al 25% de la economía en el país. Además, significaría la desaparición de la industria fabricante de empaques y envases plásticos que genera 100.000 empleos directos.

Los ponentes realizaron reuniones para socializar el proyecto, en las que ha participado Acoplásticos. Ello hace pensar que podrían ajustar la ponencia para segundo debate. “Transformar el texto en uno que guarde el espíritu de la prohibición de los plásticos, pero que regule aquellos que se podrían manejar a través de la economía circular y el reciclaje”, precisó Losada.

En este sentido, González aseguró que incluirán tres aspectos. Primero, incorporar temas asociados con la cultura ciudadana para fomentar el reciclaje. Segundo, implementar incentivos tributarios para empresas que produzcan o comercialicen plásticos de un solo uso, con el fin de que comiencen a usar materias primas distintas, como el almidón de yuca u otros.

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Tercero, limitar la oferta de pitillos y platos desechables de plástico y contenedores de icopor, cuya prohibición comenzaría a regir en 2020. Para el caso de las botellas pet, si el mercado no ofrece alternativas, obligarían a las empresas a que sus envases tengan un alto porcentaje de reutilización y reciclaje. “No solo desestimular el uso del plástico es la mejor alternativa, en algunos casos es necesario prohibirlos”, dijo el legislador.

Con este paso, Colombia cumpliría el acuerdo suscrito con la ONU de desestimular dicho uso para 2030. Losada y Gonzáles presentarán la ponencia para segundo debate a mediados de agosto.

Prohibición en otros países

Más de 60 países han establecido medidas para frenar los plásticos de un solo uso y otros trabajan en políticas para enfrentar los problemas ambientales que causa este material.

En América Latina, Chile acaba de prohibir las bolsas plásticas. Ya lo habían hecho Antigua y Barbuda, el primer país de la regiónen tomar esa iniciativa, seguido de Panamá. México el mes pasado prohibió, además de las bosas, otros artículos de plástico de un solo uso. Costa Rica, Belice, Bahamas y Bermuda han lanzado medidas para reducirlo en 2021. Ecuador lanzó una restricción progresiva de pitillos, bolsas y botellas desechables. En Perú debaten un impuesto a estos productos.

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En Reino Unido buscan prohibir pitillos y copitos de plástico a partir de abril de 2020, así como incluir un impuesto a los envases de plástico con menos de 30% de contenido reciclado. 

Por ahora, los promotores de la iniciativa que se trámita en el Legislativo harán foros en todo el territorio nacional. Habrá que esperar si Colombia entra en la lista de los países que avanzan en esta prohibición.