Alejandro Char confirma su hegemonía en Barranquilla: por tercera vez los electores le dieron un contundente voto de confianza

Alejandro Char Chaljub es el nuevo alcalde de Barranquilla, por tercera vez, con 400.164 votos, el 73,26 % de la votación y el 96,36 de las mesas informadas. Arrasó en las urnas. Char se dio el lujo de imponerse sobre los demás candidatos, prácticamente, sin hacer una campaña exhaustiva.

Álex, como le dicen sus amigos –y lo conocen en toda la costa y el país–, no solo es político, también es empresario y un apasionado del fútbol. Ha estado al frente de las tiendas Olímpica y del Junior de Barranquilla, el equipo insignia de la ciudad y del Caribe, el cual ha liderado por varios años. De hecho, a comienzos de este año trajo a Juan Fernando Quintero, un fichaje que duró poco y terminó desilusionando a la hinchada del cuadro tiburón.

Char siempre lleva una gorra puesta. Es fiel a su estilo relajado, tranquilo y chévere. La gente en Barranquilla lo quiere sin importar los escándalos o las polémicas que acumule y por eso obtuvo la victoria. Para muchos ciudadanos es más importante el avance que ha logrado en la ciudad bajo la dinastía de su familia que los múltiples señalamientos en su contra.

El más reciente escándalo que terminó impactándolo sucedió a cuatro días de las elecciones. Según un medio de comunicación mexicano, Char y miembros de su familia habrían estado relacionados, supuestamente, a través de su banco Serfinanza con el cartel de Sinaloa en México. Desde la campaña negaron los hechos y dijeron que se trató de un “montaje”.

Como estaba sobrado en su campaña, las últimas semanas las dedicó a apoyar a Eduardo Verano de la Rosa para la Gobernación del Atlántico y a otros candidatos a las municipalidades cercanas a la capital atlanticense. Char fue empujado en la contienda por Germán Vargas Lleras, líder de Cambio Radical, y por el expresidente César Gaviria, cabeza del Partido Liberal. Detrás de él también estuvo su padre, Fuad Char, el cacique de esta familia de origen libanés que hoy ratifica su hegemonía en Barranquilla.

La de Serfinanza no es la única polémica que acumula Char. Otro de los recientes escándalos fue producto de las declaraciones de la excongresista Aida Merlano, investigada por compra de votos en la costa Caribe. Merlano mencionó en sus declaraciones ante la justicia a Álex y a sus familiares.

Ante la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia, Merlano dijo que el alcalde, supuestamente, habría “cuadrado” 10.000 votos para la votación de ella y su hermano, el exsenador Arturo Char, para las elecciones de 2018. Arturo, actualmente, también está siendo investigado por la Corte Suprema por compra de votos.

Además, según Merlano, Char la habría apoyado en sus aspiraciones para el Congreso ese año, un día antes de ir a las urnas. Según dijo la excongresista, el 10 de marzo de 2018, Char le habría entregado personalmente a ella en la Casa Blanca –su sede de campaña– 500 millones de pesos en efectivo.

La relación entre el dinero, las campañas y Álex Char han sido constantes. El alcalde electo también fue mencionado en el entramado de Nicolás Petro en la Fiscalía. Los investigadores encontraron un chat entre Day Vásquez y Char en el que él le dice que le llevarán a su casa “5 puntos”. Y agrega: “Quien gane quien Dios eligió para gobernar (sic)”.

Char no solo ha aspirado a la Alcaldía de Barranquilla y a la Gobernación del Atlántico, el año pasado fue precandidato a la Presidencia en el Equipo por Colombia. Quedó en el segundo lugar con 706.587 votos, detrás de Fico Gutiérrez.

A Char le negaron la renovación de su visa a Estados Unidos en enero de este año. “Son cosas que ya nos han sucedido en el pasado. Estamos nuevamente haciendo la fila”, dijo en su momento.

Hoy, Char llega con una popularidad bastante alta a dirigir la ciudad que le ha dado todo y en la que se siente cómodo. Mientras tanto, en el ámbito nacional seguirá en el ojo público por las investigaciones que hay en contra de él y de su familia.