Congreso evaluará posible desfase presupuestal en reforma a la salud: cuentas de los privados no cuadran con las del Gobierno

Los privados están convencidos de que hay un desfase en los costos que se calculan del proyecto de reforma a la salud que está en trámite en el Congreso y este lunes van a entregarles a los congresistas un informe sobre lo que ellos consideran son los valores reales que tendrá ese articulado que va para su segundo debate en la plenaria de la Cámara de Representantes.

El análisis llegará al Congreso cuando faltan días para que comience el segundo debate y mientras ese articulado no convence a varios sectores del Legislativo. Por un lado, la oposición insiste en su hipótesis de que este destruirá el sistema de salud; del otro, en el Pacto Histórico hay quienes aseguran que la concertación afectó las bases de este; mientras que los independientes creen que la acumulación del texto de iniciativa presidencial con la del que fue escrito por esa bancada no tuvo en cuenta sus aportes a la discusión.

La cuestión de los problemas financieros del Estado para cumplir con lo prometido en la reforma a la salud augura ser otro ingrediente que marque la discusión con la que el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, cerrará sus pujas ante el Congreso en 2024.

El estudio que será presentado a los congresistas estima que hay una diferencia de $163 billones de pesos en los próximos diez años entre el costo fiscal calculado por la cartera de Salud y lo que terminaría siendo el valor real del proyecto, un monto que se calcula en cerca del 10% del PIB.

Esa cifra fue planteada por la ANDI en un informe que hicieron público hace dos semanas y que este lunes llegará a los escritorios de los congresistas que tendrán que estudiar el articulado, probablemente antes de que se termine el año.

El argumento de los empresarios es que el modelo de la ANDI arroja un déficit presupuestal de $141,4 billones, mientras que la estimación que hace el Gobierno de este documenta un superávit de $21,8 billones.

Entonces, ¿hay certeza sobre los costos reales de la reforma a la salud? El representante Alexander Quevedo, quien es uno de los ponentes de la reforma, sostiene que por ahora desconoce el análisis de los empresarios, “pero el aval fiscal que presenta el gobierno proyecta sostenibilidad del sector de manera progresiva”.

Ese rubro se sustenta en que el texto actual de reforma a la salud contempla el saneamiento de los hospitales públicos para que se conviertan en ISE, instituciones que tienen un pasivo de $8,8 billones a 2023 y de $10,4 billones para 2024; también a que el proyecto contempla el saneamiento de las deudas de Nueva EPS que tenía un patrimonio negativo de $6,5 billones para marzo de este año, entre otros gastos que no estarían en los cálculos del Gobierno.

La ponente de la reforma a la salud, la representante María Eugenia Lopera, respondió a la cifra del déficit presupuestal presentada por la ANDI señalando que es respetuosa de esos cálculos, pero advirtiendo que “ellos no tienen en cuenta el espíritu de la reforma que es el fortalecimiento de la atención primaria y desconocen las realidades fiscales del país de acuerdo a su gasto”.

“La reforma cuanta con aval fiscal expedido por el Ministerio de Hacienda siguiendo las reglas fiscales del país y no soy quien para poner en duda algo que han trabajado los técnicos del ministerio con amplio conocimiento del tema y una experiencia de años”, aseveró la representante Lopera.

Si bien hay dudas sobre los costos de la reforma a la salud, el Gobierno ha mostrado tener un amplio apoyo en la plenaria de la Cámara, por lo que es probable que ese articulado termine siendo aprobado en su segundo debate. Empero, sus mayores críticos están en el Senado donde tendrá que surtir dos debates más para convencer a los congresistas sobre las implicaciones fiscales de hacer realidad esa iniciativa.