El exministro de Hacienda José Manuel Restrepo dice que la consulta popular de Petro “es una casita en el aire” y pronostica que no se logrará

Los pronósticos sobre la consulta popular de Gustavo Petro, con la que promete tramitar democráticamente las reformas que virtualmente están hundidas en el Congreso, no son favorables.

Sectores independientes y de oposición no le auguran mayor éxito por razones de tiempo y dinero.

El exministro de Hacienda José Manuel Restrepo fue uno de los primeros en rechazar la iniciativa del presidente.

“Digámoslo claramente, esa consulta popular es una casita en el aire. Ni se va a lograr ni sirve para nada. Para nada distinto a hacer pura politiquería por cuenta de los colombianos. Y mientras tanto la salud, la educación y la vivienda están desfinanciadas”.

Restrepo dijo que la prioridad del Gobierno “es el burdo populismo para agitar las bases, sabiendo que nada se va a conseguir y que el ciudadano se ve perjudicado porque una consulta cuesta dinero que siempre será mejor invertirlo en lo social”.

A juicio del exministro, al gobierno de Gustavo Petro “ni le alcanzan los tiempos ni tiene sentido hacer una consulta popular sobre el tema porque es un articulado técnico donde no cabe una pregunta única o una pregunta que no dé lugar a dudas en la respuesta y francamente es mejor ese dinero en programas sociales efectivos”.

Según Restrepo, la consulta popular “no es ni para crear, ni modificar ni derogar leyes. Un referendo puede ratificar o rechazar leyes, pero según el artículo 150 de la Constitución, el Congreso no es el único actor que hace las leyes”.

Restrepo le insistió a Petro esta semana que el Ejecutivo es una cosa y el Legislativo es otra.

“Esta reforma laboral no le hace bien al país en términos generales. Si respetamos la democracia y se construyen consensos entre los que piensan distinto, se logran resultados, pero con imposición nada se logra en una democracia”, manifestó en su momento.

Mientras Gustavo Petro alista los pormenores de su consulta popular, que le valdrá a la Nación aproximadamente 300.000 millones de pesos y que le permitirá hacer campaña en favor de este ejercicio democrático, ya le han salido varios opositores.

El expresidente Iván Duque, por ejemplo, anunció que él promoverá la abstención.

“La convocatoria que se quiere hacer de una consulta popular es para eludir que el Congreso corrija los adefesios contenidos en las reformas, laboral y de salud. Esa nueva improvisación, en medio de un año electoral y de una crisis fiscal, le costará al país entre 500 mil y 700 mil millones de pesos”, dijo el exmandatario.

Y añadió: “Si ese adefesio prospera, la mayoría de los colombianos nos abstendremos de ser cómplices del derroche y del golpe que se le quiere dar al Congreso”, precisó.

Por lo pronto, el Gobierno convocará una serie de movilizaciones por el país que ambientarán la consulta popular.

Además, el presidente presentará la solicitud al Congreso con la firma de sus ministros y espera que el Legislativo tome una decisión dentro de un mes aproximadamente.