El presidente Gustavo Petro perdió casi todas las batallas que asumió en el Congreso de la República durante este semestre y cierra el año con una negativa rotunda del poder Legislativo a los proyectos más importantes de su Gobierno.
Lejos del escenario que vivió en los primeros meses de su administración, cuando los congresistas le dieron una amplia mayoría en la corporación, el jefe de Estado termina el año sin que ninguna de sus grandes reformas haya prosperado.
La más reciente fue la reforma a la salud, que se hundió en su tercer debate en la Comisión Séptima del Senado, donde ocho de los 15 senadores respaldaron la ponencia de archivo del proyecto.

Ahora el Gobierno busca revivir ese articulado con una apelación que hará su bancada ante la plenaria del Senado, pero tendrá que esperar hasta marzo de 2026 para intentar tramitar esa figura, la misma que revivió la ya aprobada reforma laboral.
Sin embargo, el escenario es diferente. Para ese momento ya habrán pasado las elecciones legislativas y el país estará en campaña para los comicios presidenciales, lo que pone la atención política en asuntos electorales.

No solo se cayó la reforma a la salud. El proyecto de ley de financiamiento, que pretendía recaudar 16 billones de pesos para el Presupuesto General de la Nación del próximo año, se hundió durante el trámite en las comisiones económicas del Senado y la Cámara de Representantes.
De hecho, el fracaso de esa reforma tributaria fue el vaticinio de que la reforma a la salud también estaba por hundirse, porque en el proyecto no quedó claro cómo se financiarían los cambios en el sistema de salud.
“Esperaron hasta el último día para hundir la reforma a la salud y así no poder revivirla en plenaria como hicimos con la laboral. Han jugado con la salud de los colombianos de una forma cochina y barata”, alegó el ministro del Interior, Armando Benedetti.

La reforma a la justicia que el exministro de Justicia, Eduardo Montealegre, radicó el 20 de julio, durante la instalación de la última legislatura del Congreso, jamás se debatió, y el Gobierno se quedó sin la oportunidad de aplicar nuevos ajustes al sistema judicial.
Es más, de sus grandes reformas solo la laboral ha logrado prosperar, porque la pensional sigue pendiente del análisis de la Corte Constitucional. Tampoco se puede olvidar el fracaso de la bancada del Gobierno en la elección del nuevo magistrado de la Corte Constitucional, cuando la oposición se impuso votando a favor de Carlos Camargo.
El proyecto de jurisdicción agraria lleva un año estancado. Este había sido promovido por el exministro del Interior y actual candidato a la Presidencia, Juan Fernando Cristo, y era el camino que el Gobierno había prometido para acelerar los procesos de los campesinos que están ante los jueces agrarios en su búsqueda de acceso a la tierra.
No obstante, al Gobierno le quedan algunas horas para intentar una victoria legislativa porque el Ministerio del Interior citó a sesiones extras en el Congreso. Y, justamente, la Comisión de Acusación de la Cámara citó de manera exprés a una sesión para este miércoles 17 de diciembre, en la que se votaría el archivo de las investigaciones contra el presidente Petro.









