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Estos son los principales proyectos de Alejandro Char y Eduardo Verano para Barranquilla y el Atlántico
El gobernador del Atlántico, Eduardo Verano de la Rosa, y el alcalde de Barranquilla, Alejandro Char, conversaron con el director general de SEMANA, Yesid Lancheros, sobre los proyectos para la región.

Yesid Lancheros: Alcalde Char, ¿qué está pasando en materia de seguridad en Barranquilla? Usted ha dicho que ese es el desafío más grande que enfrenta la ciudad.
Alejandro Char: Las bandas criminales se han venido fortaleciendo de una manera increíble. Antes estaban en la provincia, en los espacios lejanos, pero ahora se han tomado muchas de las capitales en Colombia, y Barranquilla no ha sido ajena a esta realidad. Nosotros lo decimos con toda la franqueza porque tenemos que enfrentarlo con decisión. El gobernador Eduardo Verano y yo nos hemos esforzado por trabajar ese tema desde que estábamos en campaña. La extorsión es un problema real, estamos enfrentando un monstruo de mil cabezas y sabemos que le está faltando apoyo a la Policía. En Barranquilla y en el Atlántico hemos invertido 600.000 millones de pesos para tener buenos resultados.
Y.L.: Gobernador, en los municipios del departamento se ve que hay bandas como los Costeños o los Pepes, en muchos casos al servicio del Clan del Golfo. ¿Qué es lo que más le preocupa de lo que está ocurriendo en el departamento?
Eduardo Verano: Lo ideal sería poder llegar a unas conversaciones de paz y las estamos promoviendo junto a Álex Char. Incluso, hubo un obispo anglicano que estaba tratando de buscar que pudiéramos llegar a tener unas conversaciones entre alias Castor y Digno Palomino, que ambos están en la cárcel, pero desde allí siguen delinquiendo. Este tema se ha tratado de muchas maneras. Acabamos de inaugurar un centro de operaciones para la Policía en Sabanalarga, otro en Soledad, y en Los Almendros haremos una gran estación de operaciones de la Policía, donde tenemos serias dificultades. La fuente del problema es que acá hay bandas que se disputan el dominio de los dos grandes negocios de la extorsión y los homicidios, y que tienen el 80 por ciento de los casos. Entonces, ¿cómo no nos vamos a sentar con ellos?
Y.L.: ¿Y qué falta, gobernador, para sentarse con esas bandas?
E.V.: No es fácil, porque debemos tener las debidas autorizaciones a nivel nacional, porque muchas de las cosas que nos piden no corresponden a la esfera de nuestro radio de acción, como exonerar las penas de los delincuentes. Entonces, en la mesa debe sentarse todo el andamiaje del Estado, de tal manera que podamos llegar al dominio de unas conversaciones que nos permitan acabar para siempre las extorsiones y los homicidios.

Y.L.: Hay una preocupación de los alcaldes porque les ha tocado prácticamente solos, no han recibido el apoyo del Gobierno nacional. En algunas regiones del país han descartado cualquier tipo de proyecto con el Gobierno por esa falta de trabajo en equipo. Alcalde Char, ¿el diálogo con el Gobierno nacional está roto?
A.C.: Yo quiero mucho a mi gobernador, pero prefiero negociar cuando estén arrodillados. Son unos delincuentes. Yo camino por los barrios y están cooptando a nuestros pelados, los sacan de los colegios ofreciéndoles 3 millones de pesos para delinquir. Nosotros tenemos la autoridad suficiente para negociar, pero sobre las condiciones de nosotros. El Estado está por encima de todas las cosas.
Y.L.: ¿Y ve posible arrodillarlos?
A.C.: Tenemos que estar en las esquinas, tenemos que tener oferta laboral para nuestros jóvenes y mil herramientas más. Yo les apuesto a la educación y a la seguridad. Por ejemplo, la universidad pública distrital pasó de 1.500 a 17.000 estudiantes. Entonces, ya tenemos a los jóvenes encontrando que hay otras posibilidades de salir adelante. Mientras yo sea el alcalde de Barranquilla, esas serán las condiciones.
Y.L.: Alcalde, no me respondió la pregunta. ¿Cómo está el diálogo con Petro?
A.C.: Sí, hablo con él y con todas sus instancias del Gobierno. Cuando los barranquilleros me eligieron alcalde, no me eligieron para que yo peleara con el Gobierno nacional. Si yo peleo con el presidente Petro, quien pierde no es Álex Char, sino Barranquilla. Entonces, yo ese camino no lo cojo.
Y.L.: Gobernador, ¿cómo ve usted la relación con el Gobierno nacional? ¿Ha sentido el apoyo, siente que hay recursos?
E.V.: Hay que hablarlo por temas. Tener la posibilidad de abrir espacios de negociación en el tema de seguridad no nos quita que tenemos la fuerza necesaria para controlar las organizaciones por fuera de la ley. La forma de dominarlos tiene que ser a través de la inteligencia militar. Eso no quiere decir que no estemos escuchando las posibilidades de un diálogo que nos permita acabar con la extorsión, porque son las mismas bandas las que tienen un sistema del gota a gota que saca a las personas del mercado si no les pagan. En nuestro territorio necesitamos una paz total, queremos una ciudad en paz y un área metropolitana tranquila a donde podamos traer a los inversionistas.

Y.L.: ¿Cómo le ha ido con el Gobierno? ¿Lo han atendido?
E.V.: Lo que dice Álex: instancias. Tú de pronto no hablas con esa fluidez con Petro, él tiene otro estilo de manejo. Nuestra relación es más con los ministros, con las instancias del Gobierno nacional con las que finalmente tienes que sentarte día a día, porque los grandes recursos están en el Estado central, que maneja el 85 por ciento de los recursos del país. Todas las gobernaciones y alcaldías manejan el miserable 15 por ciento de los recursos y eso va a cambiar de forma paulatina hasta llegar al 39 por ciento con la reforma al Sistema General de Participaciones. Necesitamos una política de Estado que defina incentivos, exenciones tributarias y las responsabilidades en la elaboración y ejecución de los proyectos de construcción de toda la infraestructura básica necesaria para tener acceso a esas nuevas tecnologías.
Y.L.: Para el país es evidente la transformación que ha tenido Barranquilla. ¿Cuál será el símbolo de su tercera administración, alcalde Char?, ¿usted está pensando en dos líneas de metro para la ciudad?
A.C.: En términos económicos, Barranquilla sí ha sido una república independiente. El mejor socio que tiene la ciudad es el sector empresarial y todos los contribuyentes de esta ciudad. Barranquilla vive del predial y de la industria y comercio, y eso es porque la gente le paga a la ciudad los recursos para que salga adelante. En el año 2007 se recaudaron 180.000 millones de pesos y ahora esos dos impuestos suman 2,5 billones de pesos. Entonces, Barranquilla hoy se sienta con J. P. Morgan, con el Banco Alemán o Itaú de Brasil y tiene créditos de 100 y 150 millones de dólares. El mejor socio que ha tenido Barranquilla es su gente. Hemos construido 130 colegios y 50 hospitales sin tener que preguntarle a nadie. Nosotros no estamos esperando que haya una reforma a la salud para atender bien a la gente.
Y.L.: Alcalde Char, ¿en dónde se imagina esas dos líneas del metro de Barranquilla?
A.C.: El metro va a ir más temprano que tarde. Estamos revisándolo para tenerlo en la 30 y en la Circunvalar. Apenas estamos empezando a hablar del tema, pero para nosotros lo más importante en este momento es combatir la delincuencia, que nos monta a los pelados a una moto para enseñarles a matar. No solo vamos a dejar el metro diseñado, sino que vamos a ampliar el Estadio Metropolitano, pero, ¿de qué nos sirven las grandes obras si no tenemos un capital humano formado?
Y.L.: Gobernador, ¿cuáles son los logros en inversión social del departamento?
E.V.: Nosotros tenemos un plan de gobierno en el que vamos a invertir más de 7 billones de pesos enfocados en un sistema vial de dobles calzadas. Hace pocos días pusimos en marcha la construcción de la vía Juan Mina, que va a tener 17 kilómetros en doble calzada en toda una zona industrial y se va a convertir en una gran zona de expansión de todo lo que tiene que ver con la zona productiva del departamento. Ese mismo sistema vial tendrá una doble calzada en la vía Malambo-Baranoa, pasando por Caracolí, que también está en doble calzada. Vamos a hacer la extensión de la calle Murillo hasta la segunda circunvalar, son siete kilómetros. Se está construyendo un sistema vial en el área metropolitana y en el departamento que transformará sustancialmente la forma en la que se hacen negocios. Haremos una vía que saldrá de Juan Mina hasta Puerto Colombia. Estamos haciendo el mantenimiento de 400 kilómetros de vías y construyendo 150 kilómetros de nuevas vías. Nosotros construimos un hospital en cada municipio y eso nos ha permitido tener una atención hospitalaria de primer orden. También tenemos un sistema escolar que está siendo utilizado por las tardes por el Instituto Universitario de Barranquilla, lo que ha aumentado la oferta universitaria. Recientemente, inauguramos Bellas Artes, proyecto que contó con una inversión de 40.000 millones de pesos. Cuando nosotros llegamos, la Universidad del Atlántico tenía 8.000 estudiantes y ahora tiene 27.000. Estamos trabajando en llave entre la Alcaldía y la Gobernación para proyectos como el Malecón o la modernización del estadio. Esa gran transformación se ve en la realidad.
Y.L.: ¿Cómo surge el proyecto de Mi Casa Bacana, que ha sido una de las grandes apuestas en inversión social de su administración?
E.V.: Mi Casa Bacana es un programa que consiste en ir a los barrios de invasiones donde las personas llevan años viviendo en construcciones sin pisos o techos y con paredes de plástico. Entonces, la Gobernación entra a la casa para ponerle piso y techo, la parte eléctrica, baño, cocina y una habitación. Esto significa una inversión de 18 millones de pesos por casa, llevamos 6.000 listas y esperamos terminar con 40.000 al terminar el periodo. Todo se hace con recursos propios de la Gobernación.
Y.L.: Alcalde, al cumplirse un año de la intervención de Air-e por parte del Gobierno nacional, está claro que esa intervención no ha dado los resultados esperados. ¿Qué hacer?
A.C.: Hace menos de dos meses mandamos una carta al presidente Petro pidiéndole que nos entregara Air-e a la Gobernación del Atlántico y a la Alcaldía de Barranquilla. Nosotros tenemos la experiencia y nos duele lo que está pasando con la gente. Estamos a disposición de que el Gobierno nacional nos la entregue. Si tenemos que comprarla, tenemos los recursos para hacerlo, pero nosotros debemos ser los proveedores del servicio eléctrico del departamento del Atlántico. Estamos esperando una respuesta para poder operarla, así como operamos en todo el departamento el agua y el alcantarillado. Llevan cinco interventores en siete meses.

Y.L.: Si Air-e es operado por la Alcaldía y la Gobernación, ¿se soluciona el problema de la energía en Barranquilla?
E.V.: Yo sí creo. Y en todo el departamento del Atlántico. Estamos día a día conociendo los problemas de la gente. Estamos en disposición de sentarnos con un generador y comprar energía barata a 10 o 15 años con recursos del departamento y de la Alcaldía para bajar las tarifas y mejorar el servicio.
Y.L.: Pero el Gobierno no les responde...
E.V.: Por lo menos hay la voluntad para tratar de resolver el problema.
Y.L.: Alcalde, ¿por qué la gente en la costa paga estas tarifas tan caras por el servicio de la energía, cuál es la raíz del problema?
A.C.: Para mí este es un tema administrativo, porque no hay una administración a la que le duela el tema. Esto sucede en Atlántico, Bolívar, La Guajira, Sucre, César y Córdoba, en todo el Caribe colombiano que paga tarifas altísimas con muy mal servicio. Ya le planteamos una solución al Gobierno y esperamos que nos responda pronto.
Y.L.: Gobernador, ¿la intervención de Air-e no dio resultados?
E.V.: Lo más importante es dónde estamos ubicados. Estamos en la zona más privilegiada del país y tenemos toda la disposición para que se implementen las nuevas tecnologías solares y eólicas. Entre Guayepo 1, 2 y 3 habrá más de 1.200 megavatios generándose con energía solar. En el Atlántico ocurrirá la gran transformación energética del país. Estamos proponiendo que se cree la gran gestora energética del Caribe que nos permita tener un instrumento para los proyectos de energía solar y eólica, y tener la infraestructura necesaria para sacar esa energía.
Y.L.: La encuesta de Barranquilla Cómo Vamos señala que el 60 por ciento de los habitantes de Barranquilla considera que la pobreza es uno de los temas prioritarios a los que la administración debería prestarle atención y casi el 25 por ciento de las personas se considera pobre. ¿Qué ha hecho sobre este tema, alcalde?
A.C.: Todos los días nos despertamos con mucho entusiasmo, con mucha fuerza, buscando que nuestra gente tenga un mejor mañana. Cuando hablo de los proyectos de primera infancia, de colegios públicos dignos, de bilingüismo y de las nuevas sedes del Sena, estamos rompiendo barreras. A pesar de que todavía tenemos problemas, Barranquilla es una de las ciudades que más ha bajado su pobreza; esas cifras eran muy diferentes en 2007, cuando llegamos a la administración.
Y.L.: Gobernador, usted está promoviendo el referendo por la región del Caribe. Todo depende de un proyecto que debe aprobarse en esta legislatura del Congreso. ¿Ve viable que en las elecciones del 8 de marzo de 2026 pueda votarse ese referendo?
E.V.: Queremos llegar a ser una entidad autónoma para que la región Caribe pase de ser región de administración y planificación a una región como entidad territorial. Con esto se tendría acceso a un mayor volumen de recursos. En un futuro veremos cómo sale la ley que entrará al Congreso de la República para que nosotros podamos tener un gobernador regional por elección popular y una asamblea legislativa regional por elección. O sea, un estamento regional poderoso que tenga el mayor manejo de los recursos del Sistema General de Participación. Tenemos la responsabilidad de tener un gran crecimiento en toda la región Caribe.
Y.L.: Alcalde, usted está jugado con este tema también.
A.C.: Sobre todo con la descentralización de los recursos. Este tema está en manos de la gente. Las regiones de Colombia no pueden estar dependiendo del Gobierno nacional. Hay 1.070 alcaldes yendo a Bogotá todas las semanas, gastándose el presupuesto de sus municipios en viajes para rogarle a un ministro o a un viceministro para que les saquen adelante un proyecto. Eso no hace democracia, por el contrario, nos hace cada día más pobres. En Barranquilla fortalecimos nuestro predial y el impuesto de industria y comercio porque no encontramos eco en Bogotá.
Y.L.: Alcalde, usted finalmente no viajó a Washington con la delegación de alcaldes que visitó esa ciudad justo cuando se conoce que el país está en riesgo de ser descertificado. ¿Cuál era el objetivo de este viaje?
A.C.: Tormenta. Los temas de certificación o descertificación son del Estado nacional. Nosotros tenemos una muy buena relación con el Gobierno americano y permanentemente nos reunimos con su embajador encargado para los proyectos que estamos trabajando, como un edificio antinarcóticos. La AmCham mantiene una relación permanente con el gobernador y conmigo, y hay muchas cosas adelante con el Gobierno americano.