Investigación
Exclusivo: estos son los nuevos chats, videos y testimonios que enredan a Miguel Quintero, el hermano del exalcalde de Medellín
SEMANA revela conversaciones y testimonios que involucran al hermano de Daniel Quintero, exalcalde de Medellín, en presuntos hechos de corrupción.
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La Justicia le está pisando los talones a Miguel Quintero, el hermano del exalcalde Daniel Quintero, por presuntos hechos de corrupción que habrían ocurrido en Medellín entre 2020 y 2023. SEMANA revela nuevas conversaciones de WhatsApp, audios y testimonios que lo podrían llevar a rendirles explicaciones a las autoridades.
El patrimonio de Miguel Quintero tiene encendidas las alarmas entre los investigadores, dado que testigos les relataron bajo juramento que “él cobraba el 20 por ciento de contrataciones en el Área Metropolitana, la EDU y Metroparques”, tres entidades clave de la capital de Antioquia con jugosos presupuestos.
En su defensa, Miguel Quintero le respondió a SEMANA que sus fuentes de financiación son legales: “He tenido cargos directivos en el sector público y privado, soy consultor jurídico, además de ingresos por Airbnb y como comerciante”.

Uno de los testigos escuchado por la Fiscalía, que decidió hablar con SEMANA en la capital antioqueña, reiteró que las supuestas coimas las “recibía en dinero en efectivo o en carros. ¿Dónde está esa plata? Pregunten en Panamá o Estados Unidos”.
Miguel Quintero también negó este argumento: “Falso. He sido sometido a un acoso mediático y jurídico sin precedentes por la actividad política de mi hermano. Muchos de los ataques que me han realizado provienen de fuentes anónimas que son evidentemente montajes. He sabido de exfuncionarios a los que han presionado, diciéndoles que los dejan de perseguir si hablan mal de mí o de mi hermano”.
Polémica finca
Una finca a las afueras de Medellín está en el radar de la Justicia. Miguel Quintero argumentó que el lote le costó 100 millones de pesos en 2018 y que la construcción “se realizó de a poquitos y con materiales prefabricados. La construcción terminó en enero de 2020, cuando mi hermano apenas estaba asumiendo el cargo. Se construyó con dos créditos, uno para la casa y otro para la piscina. Todavía los estoy pagando”.

Sin embargo, conversaciones de WhatsApp, a las que accedió este medio, exponen lo contrario. Por las imágenes del avance de las obras, se podría constatar que Miguel Quintero estuvo edificando la finca durante la administración de Daniel Quintero y toda no sería prefabricada.
El 20 de mayo de 2020, por ejemplo, les contó a sus amigos en el grupo de WhatsApp: “Regularmente, todas las obras llevan un 50 % de más de lo proyectado. Pero siempre uno presupuesta para tener la (casa) y dejar por fuera lo que considera lujos y lo que puede esperar. Ejemplo: piscina, ya me la cotizaron, en inicio era 80 millones, ya va en 160. Paisajismo, eran 20 millones, ya con lo que voy a hacer, se van 30. (…). Enchapada del piso exterior, en inicio, eran 15 m, y ya me da pesar invertir en algo que me arrepienta más adelante y pierda plata, eso significa que subió a 30 m. (…). Gastándome 300 más, me queda faltando. La ventaja es que es la casa para vivir. Pero ya estoy loquito”.
La Fiscalía está indagando la procedencia de estos recursos ante las denuncias que han presentado exfuncionarios del Área Metropolitana del Valle de Aburrá.

Poder en el área
Uno de los testigos, en conversación con SEMANA, reiteró los señalamientos que hizo en la Fiscalía: “Miguel Quintero era la persona que manejaba toda la contratación a través de sus tres amigos, que son Wilder Echavarría (EDU), Jorge Liévano (Metroparques) y Álvaro Villada (Área Metropolitana). Su hermano, Daniel Quintero, le entregó eso”.
Buena parte de las instrucciones se daban a través de mensajes de WhatsApp, y el ente de acusación ya extrajo cientos de conversaciones de varios teléfonos, pruebas reina en los procesos.
En el caso del Área Metropolitana, una de las personas que vio de cerca el supuesto entramado de corrupción le contó a la Fiscalía que las órdenes eran muy precisas: “Las daba Miguel Quintero a través de Álvaro Villada, subdirector de Gestión Administrativa y Financiera. Él las tramitaba en los comités de contratación y de dirección para que en todas las subdirecciones saliera la contratación y hojas de vida”.

Una de esas tareas quedó consignada en una gráfica en la que se leen los nombres de los contratistas y quiénes los recomendaban. En las referencias aparecen Luis Pérez, exgobernador de Antioquia y cercano a Daniel Quintero, varios secretarios de despacho del entonces alcalde y demás políticos del Valle de Aburrá.
Aunque se ha tratado de negar la injerencia de la familia de Quintero en las entidades vinculadas al Distrito de Medellín, Miguel Quintero y Álvaro Villada se reportaban en un grupo de WhatsApp todos los movimientos en el Área Metropolitana, donde Juan David Palacio figuraba como director.
Las órdenes
En un chat del 4 de abril de 2020, Miguel Quintero le reportó a Villada que acababa de sostener una reunión con Juan P (testigos señalan que se trataría de Juan David Palacio). Tras el encuentro, Quintero le dijo a Villada que “a trabajar más. No dejar las cosas para lo último. No relajarse”. Villada estalló: “Imposible que diga eso. Nosotros sacamos todo de una. Lo que pasa es que las abogaditas de él paran todo, todo es todo”. Quintero recomendó hacer una reunión y alegó: “Esta puta cuarentena nos tiene muy alejados. Necesitamos avanzar”.

Ese mismo día, Villada le encomendó al hermano del exalcalde de Medellín: “Dígale que nombre en la ambiental de una (Subdirección Ambiental, según referencia de testigos). Eso lo veo muy mal. Si no nombran, eso se va ya está (sic) junio. Eso nos daría 10 meses de retraso. 6 más de 4 de curva de aprendizaje”.
Quintero le afirmó que “ese man (no se identifica el nombre) creo que es mejor en planeación (Subdirección de Planeación, según referencia de testigos)”. A lo que Villada le contestó: “Ese u otro, pero usted necesita una persona de confianza urgente en la ambiental, o la cosa se para toda”. “Total”, agregó Quintero.

Los reparos del entonces subdirector del Área Metropolitana del Valle de Aburrá no pararon en el chat durante ese día. Hablándole directamente al hermano del alcalde de Medellín, añadió: “Mi negro, revisar el tema, no te miento. Lo más urgente es ambiental. Ese man metió 100 contratistas de él y no me preguntó ni siquiera a JP (Juan David Palacio, según referencia de testigos). Quebradas. Río Medellín. Fauna. Calidad del aire. Reciclaje. Residuos sólidos. Total, el que lo vetó fue JP”.
Miguel Quintero respondió: “Eso lo tenemos que hacer rápido”. Villada comentó: “Mi negro, yo hago lo que usted diga. Pero le ruego hacer cambiar a esa tal Lina Isaza, o va a padecer estos 3.5 años”. Quintero concluyó: “Necesito que lo encarguen de ambiental a vi (Álvaro Villada, según referencia de testigos)”.
Miguel Quintero le respondió a SEMANA que no tenía poder para contratar en esa entidad: “Siempre pedí a mis amigos que intercedieran por las personas que habían apoyado la campaña y habían quedado por fuera. En mi concepto, era un acto de justicia”.

Dudas de la Fiscalía
La Fiscalía tiene varios interrogantes sobre las actuaciones de Miguel Quintero. Uno de ellos se relaciona con una fotografía que compartió con un grupo de amigos por medio de WhatsApp el 6 de junio de 2020, donde se ve armamento de alta precisión. “¿Dónde está dando bala?”, le preguntó uno de ellos. Él respondió: “Jajajaja”.
Miguel Quintero le aseguró a SEMANA que tiene permiso para portar armas. Sobre la imagen en particular, relató que fue en Fedetiro: “La foto de los fusiles es en Carabineros, donde se realizaba un entrenamiento de la Policía”.
De igual manera, fuentes cercanas a la investigación contaron que hay dudas acerca de los viajes del hermano del exalcalde al exterior y los nexos con cuestionados políticos del Valle de Aburrá, salpicados en otras denuncias de posible corrupción en la administración de Quintero.