Política
Fabián Díaz reveló el motivo por el que se negó a desbaratar el cuórum y votó la consulta popular 2.0
El presidente Gustavo Petro lo llamó “traidor” por cumplir con su palabra de quedarse en la plenaria del Senado.

El senador Fabián Díaz respondió al presidente Gustavo Petro las declaraciones en las que el jefe de Estado lo llamó “traidor” por su decisión de quedarse en el recinto del Senado para la votación de la consulta popular 2.0.
La plenaria negó la solicitud del mandatario de convocar a ese mecanismo con 52 votos por el ‘no’ y solo dos por el ‘sí’, con lo que no solo se hundió el proyecto, sino que también fracasó la estrategia del Gobierno de intentar desbaratar el cuórum para esa discusión, que se llevó a cabo pocos minutos después de la aprobación de la reforma laboral en cuarto y último debate.
Díaz aseguró que, “si no honraba la palabra, el día de hoy no tendríamos nosotros un camino hacia la conciliación. Si nosotros incumplíamos, ellos también hubiesen incumplido, porque hay que tener presente que en el trámite de la reforma laboral muchos de los artículos se aprobaron con votaciones apretadas que en la gran mayoría no superaron los 54 votos, que es el cuórum reglamentario".
La propuesta de consulta popular que se hundió en esa votación fue presentada por los ministros del Gobierno, iniciativa que fue radicada mientras el jefe de Estado estaba de viaje en China y con el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, como encargado de las funciones presidenciales.
Esa proposición incluía 16 preguntas, de las cuales 14 estaban relacionadas con la reforma laboral y 4 vinculadas a la reforma a la salud, puntos que fueron agregados después de que la plenaria tumbara el primer intento de consulta popular.
El senador Díaz ha sido cercano a la bancada de Gobierno, pero, mientras que el resto de congresistas de ese sector político se retiraron del recinto para no votar ese punto, el legislador de la Alianza Verde optó por quedarse.
Su justificación es que “si los partidos tradicionales se hubiesen salido del trámite de la reforma laboral, se hubiese caído. La palabra era agotar el orden del día y nos quedamos honrando la palabra para, de esa forma, salvar la conciliación".
Además, enfatizó que “si el día de ayer me hubiese salido en la votación de la consulta, hoy muy seguramente el panorama sería desalentador y no tendríamos la posibilidad de hacer una conciliación”.
La reforma laboral pasó a conciliación entre la Cámara y el Senado, mientras que la consulta popular quedó suspendida porque el Congreso ya negó la aplicación de ese mecanismo en dos oportunidades y la Registraduría solicitó concepto de las altas cortes sobre el tema.