Indígenas desesperados por crímenes enviaron angustiosa carta a Farc de Mordisco: “A cada anuncio le siguió un acto de barbarie”

Atemorizados por una crítica ola de violencia que ha golpeado a las comunidades indígenas en varias zonas del territorio nacional, integrantes de esa población ubicados en el norte del Cauca corrieron el riesgo y enviaron una carta a las temidas disidencias de las Farc de Iván Mordisco.

En la misiva cuestionan abiertamente la supuesta voluntad de paz de las disidencias, advirtiendo que su violencia parece que se ha ensañado contra los pueblos indígenas.

“Pero esa expectativa duró poco. Nada cambió. Lamentablemente a cada anuncio le siguió un acto de barbarie”, dice uno de los apartes de la carta.

También señala la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca: “Solo en los últimos cuatro años en el norte del Cauca su organización ha sido responsable de 374 asesinatos contra Kiwe Thegnas, autoridades y comuneros, dejando heridos a decenas más”.

Detallaron que las disidencias en su desenfrenado accionar delictivo “ha puesto explosivos a 42 personas, sin contar los que han afectado viviendas y caminos vecinales; ha realizado 214 hostigamientos a bienes civiles como casas y escuelas; ha hecho 225 amenazas individuales a miembros de nuestras comunidades y 112 amenazas indiscriminadas”.

“Ha reclutado a 785 menores de edad, han desaparecido forzosamente al menos a 25 personas y extorsionado a casi todas las comunidades. Hablamos de por lo menos 1.777 acciones contra las comunidades nasa del norte del Cauca”, expresaron en la carta.

Además indicaron esas comunidades indígenas: “No se les puede eximir de la responsabilidad por los graves hechos ocurridos en el norte del Cauca. De igual manera, este es un mensaje dirigido a los Frentes Dagoberto Ramos, Carlos Patiño y Jaime Martínez, por si algo tienen de interés”.

“¿Qué sentido tiene para ustedes destruir al Cric, a la Cxhab Wala Kiwe - Acin, al Proyecto Nasa, a Sa’t Tama Kiwe de Caldono, a los gobiernos indígenas de todo el departamento? ¿A quién le sirve que desaparezca o se debilite una de las organizaciones sociales más importantes del país”, señalaron.

Defensor del Pueblo califica a ‘Antonio García’ e ‘Iván Mordisco’ como “mentes envenenadas y retorcidas” que no quieren la paz

Por otro lado, para el defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis, el anuncio del ELN de dar por terminada la suspensión de los secuestros con fines económicos reafirma la falta de voluntad del grupo guerrillero para avanzar en un proceso de paz, a pesar de compromisos previos con el gobierno del presidente Gustavo Petro.

“El anuncio del ELN (...) demuestra por enésima vez la poca voluntad que tiene para sacar adelante una conversación de paz, pese a los compromisos establecidos previamente por las delegaciones del Gobierno nacional y ese grupo subversivo”, expresó el defensor del Pueblo.

Para Camargo, “esta práctica va en contravía de los principios rectores del Derecho Internacional Humanitario (DIH), desfigura la dignidad de las personas, violenta los derechos humanos y pone en peligro el más valioso de ellos, como lo es el derecho a la vida”.

El defensor también se refirió a la postura del Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc, comandadas por alias Iván Mordisco, que recientemente perpetró una masacre en el Cauca. Camargo Assis consideró que esta acción también demuestra la falta de voluntad de este grupo para sumarse a los esfuerzos de paz en el país.

Ante estos acontecimientos, Camargo Assis respaldó la decisión del presidente Petro de emprender una ofensiva militar en el Cauca para combatir la criminalidad.

“El hecho de que el jefe de Estado anuncie una ofensiva militar en ese departamento para que sea combatida la criminalidad, no es otra cosa que atender lo consignado en la Constitución Política: velar por la seguridad de la población, siempre respetando los derechos de las personas”, enfatizó.

Finalmente, Camargo calificó a los máximos líderes de estas estructuras armadas ilegales, alias Antonio García y alias Iván Mordisco, como “mentes envenenadas y retorcidas, cuyo único propósito es hacer el mal”.