POLÍTICA
Los ex-M-19 se han convertido en funcionarios guardianes del presidente Gustavo Petro. Son de su mayor confianza y todos manejan información sensible de los colombianos
Por lo menos cinco exintegrantes de esa guerrilla ocupan hoy importantes cargos en el Gobierno y manejan información sensible de los colombianos.
Con la llegada de Gustavo Petro a la Presidencia, se consolidó un hecho que ha sido criticado: en distintos cargos hay exintegrantes del M-19. Por ejemplo, el director del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), Carlos Ramón González, militó en esa guerrilla y tenía un rango mayor que el propio Petro. González fue uno de los fundadores del partido Alianza Verde y le habla al oído al mandatario.
Según recordó Carlos Alonso Lucio, exintegrante de ese grupo armado, el director del Dapre fue mano derecha de Carlos Pizarro y formó parte de la apertura del proceso de paz en el Cauca, considerada la piedra angular para la firma del acuerdo entre la guerrilla y el Estado. “Fue una persona que trabajó con Everth Bustamante. En general, fue una persona con mucha trayectoria y reconocimiento en el M-19”, le contó Lucio a SEMANA.
Otro ex-M-19 con poder y que maneja información sensible del Estado es Manuel Casanova, director de la Agencia Nacional de Inteligencia (DNI), una institución que se encarga de las pesquisas frente a riesgos y amenazas para el país. De hecho, cuando fue nombrado, hubo diversas críticas y el presidente Petro salió en su defensa. “Todavía creen que un filósofo estudiado en Alemania puede interceptar teléfonos”, aseguró el mandatario.
SEMANA contactó a Casanova para consultarle sobre sus funciones en el cargo, su pasado en el M-19 y la información sensible que puede manejar desde el Gobierno. Sin embargo, afirmó que por ahora “no tiene previsto conversar con los medios”.
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El funcionario afirmó que ha trabajado por desarticular algunas “mafias” que, según ha dicho, venían funcionando en la entidad. Sectores de la oposición también le han reclamado, pues Rodríguez redujo o retiró esquemas de seguridad. Sufrió un atentado en marzo de este año cuando iba a ingresar a su vivienda y sugirió que los responsables eran precisamente esas estructuras a las que ha enfrentado en la UNP.
El más reciente nombramiento de exguerrilleros del M-19 en el Gobierno fue el de René Guarín, quien ganó reconocimiento hace varios años por la búsqueda de su hermana, víctima de la toma del Palacio de Justicia efectuada por esa guerrilla. Guarín se desempeñará como jefe de la Oficina de Tecnologías y Sistemas de Información. Ya había trabajado con Petro cuando fue alcalde de Bogotá. “Hemos cumplido nuestra palabra”, afirmó el nuevo funcionario.
A la baraja de exguerrilleros en el poder se le suma Otty Patiño, jefe negociador del Gobierno en el proceso de paz con el ELN. Patiño, al igual que González, tuvo un importante cargo en el M-19 y era un hombre de relevancia, más que Petro.
De hecho, Patiño fue uno de los fundadores de esa guerrilla y designado por Pizarro para las negociaciones con el expresidente Virgilio Barco, que derivaron en la desmovilización del grupo armado y la Asamblea Nacional Constituyente. “El pasado es el pasado, tiene sus luces y sus sombras”, le dijo Patiño a SEMANA. Son personas de confianza del presidente Petro. Algunos sectores temen posibles excesos de estos funcionarios en el manejo de información privilegiada y sensible de los colombianos.