POLÍTICA
Ministro Armando Benedetti, molesto porque Partido Conservador no votará a favor de la reforma a la salud; habló nuevamente de “constituyente”
Con la decisión de los conservadores de no apoyar la reforma, la suerte de la iniciativa es incierta.

El Partido Conservador anunció este martes, 30 de septiembre, que no respaldará la reforma a la salud que promueve el ministro Guillermo Alfonso Jaramillo, cuyo futuro se define esta semana en la Comisión Séptima del Senado.
La posición del conservatismo molestó al ministro del Interior, Armando Benedetti, quien tiene claro que esa comisión se convirtió en una especie de piedra en el zapato para las reformas del gobierno. La reforma a la salud, por ejemplo, casi siempre muere en esa instancia legislativa.

“No queda duda del bloqueo institucional, por eso se abre camino a una Constituyente. Al Congreso le queda grande reformar la salud y la justicia”, escribió Benedetti en sus redes sociales.
Añadió: “Hoy el Partido Conservador ‘dice que no’ a la reforma a la salud después de más de cinco meses de paralizarla, sin que haya habido una reunión de bancada entre los senadores y los representantes, según el Artículo 57 de sus estatutos, y un debate en la Comisión Séptima”.
El ministro tiene claro que la decisión de los conservadores —declarados en independencia al gobierno Petro— pone en serios apuros a la reforma, porque lo más probable es que el Partido de la U, el Mira, el Liberal y otras casas políticas adopten una posición similar, como casi siempre ha ocurrido.
La senadora Nadia Blel hizo pública este martes la postura de los conservadores.
“El Partido Conservador reafirma su posición de no acompañar la reforma a la salud presentada por el Gobierno Nacional y anuncia su respaldo a la ponencia que pide su archivo”, informó.
Dijo que, luego de un estudio serio y minucioso del proyecto, concluimos que esta reforma agrava la situación actual del sistema de salud, implica un gasto desbordado del presupuesto y no cuenta con fuentes claras, precisas y duraderas de financiación”.
Añadió: “Reiteramos el compromiso para la construcción de una reforma a la salud que responda a las necesidades reales del país, pero no respaldaremos ninguna ponencia alternativa sin que garantice los recursos para proteger la salud y la atención digna para todos los colombianos”.
En la Comisión Séptima, donde se discutirá durante la semana la reforma en tercer debate, tomaron medidas especiales para evitar contratiempos y dificultades durante los debates.
“No se aceptarán personas de pie detrás de la mesa directiva, ni detrás de los senadores, ni obstruyendo las entradas y salidas de la Comisión y del recinto de sesiones”, se lee en una directriz firmada por el presidente de la Comisión, el senador liberal Miguel Ángel Pinto.

“Tampoco se aceptarán arengas ofensivas e irrespetuosas, contra ninguna de las personas que se encuentran asistiendo a la sesión. El desacato de esta instrucción acarreará las medidas y sanciones establecidas por la Ley 5.ª de 1992″, se detalla en el documento.
Si las reglas no se cumplen en medio del debate que será acalorado porque el Gobierno no está dispuesto a enterrar otra reforma a la salud, el presidente de la Comisión Séptima del Senado está facultado para levantar la sesión.