Salud
¿Cómo prevenir tempranamente la alopecia? Estos son los consejos de un experto
La prevención temprana y la identificación de signos iniciales son fundamentales para abordar este problema de manera efectiva.
La alopecia o pérdida anormal de cabello es una afectación que viven muchas personas en todo el mundo. De acuerdo con los expertos, la prevención temprana y la identificación de signos iniciales son fundamentales para abordar este problema de manera efectiva.
Así lo explica Andrés Martínez, CEO de la clínica capilar Mediarte. Según el especialista, es importante reconocer los signos iniciales de la alopecia para tomar una pronta acción.
Martínez asegura que el síntoma principal en todos los tipos de alopecia es la caída abundante de cabello. “Normalmente, se caen de 80 a 120 cabellos diarios, pero la alopecia se manifiesta cuando esta pérdida es notablemente mayor y se comienzan a ver cabellos en lugares donde antes no se hallaban, como la almohada, la ropa y otros espacios”.
Martínez, afirma que si bien existen varios tipos de alopecia, algunas de carácter temporal y otras de naturaleza permanente, la alopecia androgénica destaca como la más común, siendo responsable del 80 por ciento de los casos en hombres. Su popularidad se atribuye a un proceso hormonal y hereditario que causa el deterioro progresivo del folículo.
Tendencias
“En este grupo demográfico, además de la notoria caída de cabello, la alopecia se distingue por el adelgazamiento capilar. Por esto, la importancia de buscar la asesoría de un especialista cuando se advierte un incremento en la pérdida de cabello”, señala el CEO de Mediarte.
¿Cómo distinguir entre la caída normal y la alopecia?
Una manera sencilla de distinguir entre la pérdida normal de cabello y un problema de alopecia es prestando atención a la cantidad de cabello que se cae.
Para comprenderlo mejor, dice Martínez, ”es importante saber que cada cabello se produce en un pequeño órgano llamado folículo. Estos pasan por un ciclo de crecimiento que dura varios años, donde el cabello se mantiene en una fase de crecimiento constante (anágena). Sin embargo, al llegar al final de este periodo, el folículo entra en una fase de reposo o transición (catágena) para prepararse para renovarse”.
Durante esta fase, “el folículo libera el cabello antiguo para dar paso a uno nuevo (telógena). Lo que significa que es completamente normal que se caigan entre 80 y 120 cabellos al día en promedio. Sin embargo, cuando la alopecia está presente, sin importar su causa, se observa un aumento significativo a los valores de este rango”, explica Andrés Martínez.
Factores de riesgo comunes
La alopecia androgénica, que afecta a 9 de cada 10 hombres y 6 de cada 10 mujeres, tiene un fuerte componente genético. Para identificar antecedentes familiares, se recomienda observar si padres, tíos, abuelos, o cualquier otro familiar muestra signos de calvicie en áreas como la zona frontal, superior o posterior. Es importante destacar que la herencia puede saltar generaciones, por lo que es esencial tener en cuenta tanto la línea materna como paterna.
No obstante, también existen factores de riesgo modificables que pueden acelerar o agravar la condición, como por ejemplo:
- Las deficiencias nutricionales, como la carencia de zinc, vitamina B12, hierro, y magnesio. Las cuales son comunes en pacientes que siguen dietas restrictivas, en personas vegetarianas que no suplementan adecuadamente su ingesta de proteínas y en aquellos en estado postoperatorio. “La alopecia causada por deficiencias nutricionales suele ser temporal; el folículo se recupera al recibir los nutrientes necesarios, por lo que se denomina alopecia difusa”, agrega el especialista.
- El estrés también puede desencadenar problemas capilares, en particular un fenómeno llamado efluvio telógeno. Esto altera el ciclo de producción del cabello, llevando al folículo a saltar constantemente a la etapa de recambio, lo que resulta en una pérdida de cabello constante. En los casos de alopecia androgénica o herencia de esta, el estrés puede acelerar la progresión.
- El consumo de tabaco, junto con otras sustancias fumadas, reduce los niveles de oxígeno en la sangre, lo que afecta negativamente a los folículos pilosos y también empeora los procesos de alopecia.
- El uso constante de extensiones capilares o peinados que tiran fuertemente del cabello puede dañar el folículo, causando lo que se conoce como alopecia por tracción. Este factor de riesgo también es común para desarrollar áreas de pérdida de cabello localizadas en la cabeza.
- El consumo de esteroides o productos que aumentan la producción de testosterona es un factor determinante para el avance de la alopecia, especialmente en personas con predisposición genética a la alopecia androgénica. Este riesgo es más frecuente entre los fisicoculturistas.
Medidas de prevención temprana
Para prevenir la alopecia, Mediarte aconseja mantener una alimentación adecuada, rica en proteínas, frutas y verduras, así como evitar el consumo de tabaco y reducir los procedimientos químicos en el cabello. Además, se recomienda consultar con un especialista ante cualquier señal de aumento en la caída del cabello o si existe una clara herencia familiar de alopecia.
El CEO de la compañía, asegura que la detección temprana de la alopecia androgénica y el inicio temprano de tratamientos que nutran el folículo y lo protejan de los daños que causa la interacción hormonal conlleva a que el paciente conserve más tiempo su cabello o disminuya el avance de esta enfermedad.
“Por lo cual es importante que el paciente asista de manera temprana al notar la caída del cabello ya que en muchos casos de alopecias reversibles el resultado o la recuperación será más rápidas el tratamiento se inicia de forma temprana”.
Incluso, comenta que existe un tipo de alopecia llamada alopecia cicatrizal fibrosante, la cual es un proceso autoinmune no reversible en la cual si se inicia tratamiento de manera temprana se puede detener el avance de esta enfermedad.