NACIÓN
Fabián Ramírez y Andrés París fueron expulsados del partido Farc
La colectividad inició una depuración en la militancia por considerar que hay quienes quieren generar una división interna que no se tolerará. ¿Los expulsados seguirán el camino de Márquez y Santrich?
A la dirección del Partido Farc se le acabó la paciencia con algunos exmilitantes que a diario lanzaban duras críticas en contra de la colectividad y las decisiones tomadas para continuar con el proceso de reincorporación de los exguerrilleros que siguen en su tránsito a la legalidad.
Por esa razón, el pasado lunes se tomó la decisión de expulsar del partido a Andrés Paris, Fabián Ramírez, Benedicto de Jesús González y a Pablo Atrato. La mayoría de la dirección del partido estuvo de acuerdo con esta medida y por medio de votación se decidió que lo mejor era la salida de la militancia de estas personas.
“Eran francotiradores contra el partido y la dirección por lo que ya no tenían nada que hacer aquí”, dijo un integrante de la colectividad, quien además aseguró que tuvieron mucha paciencia por las posturas que lideraron París y Ramírez, que buscaban dividir a la militancia y generar miedos en quienes están en su tránsito a la legalidad.
Fuentes del partido que estuvieron en esa reunión en la que se les expulsó, confirmaron a Semana Noticias que la permanencia de ellos era insostenible por las constantes críticas y los intentos de sabotear varios procesos internos.
De hecho, París y Ramírez enviaron en varias ocasiones duras cartas en contra del papel de Rodrigo Londoño, en la dirección del partido y en muchas ocasiones pidieron el cambio de nombre en ese cargo, según ellos, para lograr la unidad de la colectividad.
“Ellos nos dicen que somos traidores, que no nos entregamos al Estado, que somos de la CIA, que no estamos haciendo nada para la reincorporación y todo eso es mentira”, dijo otro dirigente del partido que pidió mantener su nombre en reserva.
Esas posturas asumidas por los expulsados del partido llaman la atención, ya que todos ellos hicieron parte de la negociación que se adelantó en La Habana, Cuba, e hicieron parte de todos los procesos y acuerdos pactados entre las partes, incluso el de la dejación de armas. “Ellos supieron todo lo que se hizo en Cuba, así que no se entiende por qué ahora nos tratan de traidores. Si no les gusta el partido pues se pueden ir sin problema, pero uno no puede decir que es de Farc para hablar mal de la colectividad”, reiteró el dirigente.
El caso es que esta expulsión, lo que evidencia es la fragmentación que hay en el partido aunque se espera que con esta decisión se acaben, por un tiempo, las diferencias, que justamente estaban creando París y Ramírez, quienes en algún momento pidieron un proceso de reincorporación aparte para un poco más de 2.000 excombatientes, solicitud que fue negada por el Gobierno.
París hizo parte del Estado Mayor Central de las Farc, perteneció al bloque oriental y manejó las comunicaciones en gran parte de la negociación en Cuba, Ramírez fue el segundo comandante del bloque sur, señalado de tener nexos con el narcotráfico, aunque aterrizó en La Habana para reforzar la delegación que tuvo la extinta guerrilla.
Tendencias
Pablo Atrato fue comandante del frente 57 de las Farc que operó en Chocó y también llegó a Cuba para participar en los diálogos con el Gobierno de ese entonces cuando se tocaban temas relacionados con las comunidades afro. Además es hermano del hoy senador, Benkos Biohó, quien también recibió un llamado de atención por parte de la dirección para que no tome el mismo camino ni posturas de su familiar.
Benedicto González ingresó a las Farc en 2017 y ocupó por unos meses la curul de Jesús Santrich, pero durante todo el episodio judicial aprovechó para lanzar duras críticas contra el partido y se desmarcó de la militancia.
Lo curioso es que estos cuatro hombres tienen algo en común y es la cercanía, se desconoce si la mantengan aún, con Iván Márquez y Jesús Santrich quienes hoy son prófugos de la justicia y abandonaron el proceso de paz aludiendo razones muy similares por las que Atrato, González, París y Ramírez fueron expulsados de la colectividad.
Fuentes del partido indicaron que no pueden tener a estas personas porque sus críticas son destructivas, pero señalaron que tienen un manto de duda sobre su futuro porque hay rumores sobre la posibilidad de que se unan a las disidencias que armaron Santrich y Márquez.
Indicaron que en varias ocasiones, París junto a Ramírez llevaban a reuniones comunicaciones que tenían la certeza estaban escritas por Márquez y Santrich, con diversos mensajes y que eso les hizo sospechar de la posible interacción que pudieran tener.