Sostenibilidad
A través de la investigación, la academia también cuida el ambiente. Este es el caso exitoso de una universidad
Con líneas de investigación y programas académicos enfocados en solucionar los problemas ambientales y las necesidades de la población, la Universidad América consolida sus planes en materia de sostenibilidad. Estos son sus avances.
Para la Universidad de América, la sostenibilidad se ha convertido en una bandera de su formación educativa, con líneas de investigación y programas enfocados en solucionar los problemas ambientales y otro tipo de necesidades concretas de la población.
Desde la facultad de Ingenierías, específicamente, se han creado dos frentes para incentivar estos proyectos: uno de investigación formativa y otro de investigación formal.
En el primer frente, se cuenta con la muestra estudiantil para el emprendimiento, en la que los estudiantes plantean alternativas para solucionar problemas ambientales y minimizar el impacto de la industria química. Se realiza también la feria agroindustrial, donde se promueve el procesamiento de frutas no tradicionales como el capulí, canistel y naidí para obtener productos alimenticios, nutracéuticos y otros, pensando en el aprovechamiento de la totalidad de los frutos (cáscara, semilla, pulpa), explica Naliny Guerra Prieto, decana de la facultad.
En lo que respecta a la investigación formal, se trabaja en temas como valorización de residuos, economía circular, gestión del recurso hídrico, energías alternativas y aplicación de la biotecnología en procesos sostenibles.
Tendencias
Dentro de los proyectos materializados por los equipos de trabajo se resaltan la recuperación y el aprovechamiento de residuos sólidos plásticos, como estrategia de fortalecimiento para la protección de fuentes hídricas en Quibdó; la valorización de residuos de llantas con un enfoque de economía circular y la construcción de un prototipo para la generación de hipoclorito de sodio en sitio, en el marco de la estrategia de autoproducción de cloro para materializar alternativas que permitan mitigar el impacto de la covid-19.
También se destacan proyectos como el uso de larvas de mosca soldado negra para la valorización de residuos orgánicos en el contexto del metabolismo urbano de Bogotá, la producción de un sustituto orgánico para el icopor y las biorrefinerías de residuos del proceso de producción de mezcal de café, entre otros, para la recuperación de compuestos de interés alimenticio y farmacéutico, en tratamiento de aguas.
Sobresale el grupo de Gestión, Ambiente y Sostenibilidad (Gigas), que tiene en sus manos un proyecto para evaluar estrategias sostenibles para la preservación de suelo, agua y aire por actividades antrópicas.
“Hoy podemos afirmar que en promedio el 30 por ciento de los trabajos de grado que se realizan desde el departamento de ingeniería química e ingeniería ambiental corresponden a aportes directos a sistemas de tratamiento de aguas o manejo de residuos sólidos en el sector industrial”, dice la decana.
Mario Posada García-Peña, rector de la Universidad, añade que con esta apuesta académica la Universidad de América, en sus más de 65 años, seguirá formando profesionales responsables y comprometidos con el desarrollo sostenible del país.
*Contenido elaborado con el apoyo de Universidad de América.