Alerta por ‘estafa de la llamada perdida’: así es como delincuentes usan números internacionales para ‘vaciar’ cuentas bancarias

Las estafas telefónicas siguen siendo una de las formas más comunes de fraude en la actualidad. Entre estas se encuentra la más conocida como la estafa de la llamada perdida, o también nombrada como wangiri, un tipo de engaño telefónico que busca hacer caer a las víctimas explotando la curiosidad y el deseo de las personas de devolver llamadas perdidas a un número internacional, convirtiéndolo en una trampa lucrativa para los delincuentes.

La estrategia de los estafadores es tan sencilla como efectiva. Todo inicia con una llamada entrante desde un número desconocido que el usuario no logra contestar. Al revisar su lista de llamadas perdidas, se da cuenta de la presencia de un dato no conocido, y es ahí donde la curiosidad o la preocupación de que sea una llamada importante lleva al usuario a devolver la llamada.

Al devolver el contacto, la víctima es conectada a una línea de tarifa premium. Estas líneas están diseñadas para generar ingresos a través de cargos adicionales por minuto. Muchas veces, la persona que llama es puesta en espera con una música o mensajes automatizados que prolongan la duración de la llamada, incrementando así los costos. En otros casos, el estafador puede responder y tratar de mantener al usuario en línea tanto tiempo como sea posible, añadiendo costos exorbitantes a su factura telefónica.

Este tipo de fraude se ha detectado en varias partes del mundo, y los delincuentes suelen utilizar números con códigos de país poco familiares para evitar sospechas inmediatas. Algunos de los códigos más frecuentemente utilizados provienen de regiones como Albania (+355), Ghana (+233) o Marruecos (+212), entre otros.

¿Cómo reconocer si una llamada perdida podría ser una estafa?

Existen varias señales que pueden ayudar a las personas a identificar este tipo de estafa antes de caer en la trampa. Lo primero es que si la persona recibe una llamada perdida de un código de país que no reconoce y no espera comunicarse con alguien en esa región, es mejor no devolver la llamada. Los estafadores suelen colgar después de uno o dos timbres para asegurarse de que la llamada quede registrada como perdida.

Adicionalmente, recibir múltiples llamadas del mismo número desconocido en un corto periodo de tiempo puede ser una estrategia para incitar al usuario a devolver el contacto. Incluso, en algunos casos, los delincuentes manipulan los números para que parezcan locales, utilizando prefijos familiares seguidos de un formato sospechoso.

¿Qué hacer si cayó en la trampa?

Si la víctima alcanzó a devolver una llamada sospechosa, lo más importante es ponerse en contacto con el operador telefónico para notificar lo ocurrido. Algunas compañías pueden colaborar en la identificación de los costos asociados a estas llamadas y ofrecer orientación para prevenir futuros inconvenientes.

Es fundamental estar atentos a las facturas telefónicas para detectar cualquier cobro fuera de lo común y reportarlo de inmediato. Si aparecen cargos excesivos vinculados a estas llamadas, no dude en presentar una reclamación formal ante su operadora.