Los ciberdelincuentes están al acecho durante todo el año. Cada día representa una nueva oportunidad para cometer fraudes desde el anonimato que ofrece una pantalla y obtener grandes sumas de dinero. Sin embargo, los expertos han identificado que la Navidad es una de las épocas en las que este tipo de delitos se incrementa de manera significativa, impulsado por el ambiente festivo y el aumento de las compras masivas.
Durante diciembre, millones de personas realizan transacciones en línea, aprovechan promociones especiales y utilizan con mayor frecuencia las plataformas de pago electrónico. Este comportamiento amplía la superficie de ataque para los ciberdelincuentes, que recurren a falsas ofertas, tiendas inexistentes y enlaces fraudulentos que imitan a marcas reconocidas para engañar a los usuarios.

Las aplicaciones de mensajería y las redes sociales también cumplen un papel clave en este fenómeno. En esta época del año se intensifica la comunicación entre contactos, lo que facilita la circulación de enlaces maliciosos enviados desde cuentas comprometidas o perfiles falsos. Al provenir aparentemente de alguien conocido, estos mensajes generan confianza y aumentan la probabilidad de que el usuario caiga en la trampa.

Ante este panorama, los especialistas en ciberseguridad refuerzan sus alertas y recomendaciones para que los usuarios puedan protegerse y prevenir ataques a sus cuentas bancarias por parte de actores maliciosos. No obstante, la prevención también comienza con la adopción de buenas prácticas, ya que un simple descuido puede abrir la puerta a una infiltración silenciosa.
Uno de los primeros cuidados está relacionado con el uso adecuado de los servicios de mensajería, como WhatsApp, una de las aplicaciones más utilizadas. De acuerdo con el portal Computer Hoy, una de las medidas más sencillas consiste en desactivar funciones como la descarga automática de archivos, que aunque está diseñada para mejorar la experiencia del usuario, también puede ser aprovechada por los ciberdelincuentes.

Cuando esta opción está activada, cualquier archivo o documento recibido se guarda de forma automática en el almacenamiento del dispositivo. Esto implica que, si un delincuente logra contactar a la víctima y envía un archivo malicioso, el contenido se descargará sin que el usuario tenga la oportunidad de evaluarlo previamente, aumentando el riesgo de caer en un engaño.
Según explica la fuente, los criminales se aprovechan de esta función para introducir códigos maliciosos que, una vez alojados en la memoria del dispositivo, pueden comprometer la seguridad del equipo y la información personal del usuario.

En este contexto, los expertos insisten en la importancia de desconfiar de mensajes inesperados y verificar siempre la autenticidad de enlaces, archivos y solicitudes, especialmente durante la temporada navideña, con el fin de evitar que las cuentas bancarias y el dinero de los usuarios se vean comprometidos.










