Tecnología
El aparato eléctrico que dispara el consumo de energía y que muchos mantienen sin darse cuenta
Los electrodomésticos son claves en los hogares al permitir un mayor confort.

Los electrodomésticos son indispensables en los hogares modernos al faciltar las tareas domésticas, permitir que se ahorre un tiempo importante y generar confort.
Uno de ellos es el aire acondicionado, el cual permite un mejor ambiente en lugares donde las temperaturas son elevadas.
De acuerdo con la empresa española Repsol, el consumo de energía de este electrodoméstico oscila de acuerdo con su capacidad, eficiencia energética y la temperatura exterior. “Por lo general, suelen consumir entre 800 y 2.000 vatios por hora, dependiendo de su potencia y eficiencia”, agrega.
No obstante, los aires que tienen más de diez años de uso pueden elevar el consumo entre un 20 y 40 % en comparación con los más modernos.
Estos aparatos tienen menor eficiencia energética, algunos de sus componentes pueden estar desgastados y no poseen la tecnología inverter de los más nuevos.
Recomendaciones para ahorrar energía al usar el aire acondicionado
Una primera recomendación es evitar cambios de temperatura radicales y de forma repentina. De acuerdo con la empresa LG, aunque esto puede permitir que el ambiente se enfríe con rapidez, también puede significar un incremento de la factura de energía.
Según Repsol, una temperatura ideal para el aire oscila entre los 20 y 26 °. Si se programa por debajo de los 20 °, genera un incremento en el consumo de energía y un mayor cobro en la factura.

Otro consejo es limpiar los filtros del aire una vez al año.
“La limpieza del interior de la unidad es importante. Si se acumula polvo dentro de la máquina, es posible que el aire acondicionado tarde más tiempo en enfriarse y consuma más energía. No limpiar el interior también puede provocar olores desagradables en el interior de la máquina”, señala LG.
De acuerdo con Repsol, la limpieza permitirá que los filtros funcionen de manera adecuada. “Un buen mantenimiento garantizará que el aire funcione correctamente y dure muchos años”, subraya la compañía.
Otra recomendación es utilizar la función automática, llamada en algunos aparatos como ‘Eco’, ‘Ahorro de energía’ o similares. Su activación permite que el aire acondicionado funcione de forma automática, ajustando su intensidad, según factores como la temperatura ambiente, la humedad y hasta el número de personas presentes en la estancia.

Según Europa Press, a diferencia del modo manual, donde el aparato sigue funcionando al mismo ritmo incluso después de alcanzar la temperatura deseada, el modo automático reduce el esfuerzo del compresor cuando ya se ha enfriado la habitación, ahorrando electricidad sin renunciar al confort.
Una recomendación adicional es dirigir el flujo de aire hacia el techo en vez de hacia abajo, pues mejora la distribución del frío. El aire, al caer por su propio peso, refresca la habitación de forma más uniforme.