Ciencia

El intrigante color del cometa interestelar 3I/ATLAS que pone en alerta a la comunidad científica

El cometa 3I/ATLAS sorprende por pasar de un tono rojizo a un resplandor verde intenso.

1 de octubre de 2025, 12:34 a. m.
El visitante interestelar brilla ahora con un verde esmeralda que desconcierta a científicos.
Los astrofotógrafos Michael Jäger y Gerald Rhemann capturaron bajo los cielos de Namibia el resplandor verde del visitante cósmico durante el eclipse lunar del 7 de septiembre. | Foto: Michael Jäger and Gerald Rhemann

El cometa 3I/ATLAS sigue en la mira de la comunidad científica tras presentar un fenómeno inesperado, un cambio de color.

Este objeto, de unos 11 kilómetros de diámetro, se acercará a su perihelio el próximo 29 de octubre, momento en el que los astrónomos esperan respuestas más claras.

Observaciones bajo un cielo excepcional

La transformación cromática fue registrada el 7 de septiembre en Namibia por los astrofotógrafos Michael Jäger y Gerald Rhemann, quienes aprovecharon la oscuridad de un eclipse lunar para capturar imágenes del cometa. Lo habitual era esperar la formación de una coma y cola más visibles con la radiación solar, pero no el resplandor verde que ha sorprendido a especialistas en todo el mundo.

El cometa 3I/ATLAS es un objeto interestelar que no pertenece al sistema solar.
El cometa 3I/ATLAS es un objeto interestelar que no pertenece al sistema solar. | Foto: Getty Images

Un origen interestelar

El 3I/ATLAS fue detectado en julio mientras se aproximaba al sistema solar a más de 210.000 km/h desde una región más allá de la órbita de Júpiter, de acuerdo con Live Science. Los análisis revelaron que se trata de un objeto interestelar, posiblemente más antiguo que nuestro propio sistema solar y expulsado de un sistema estelar distante dentro de la Vía Láctea.

El misterio del color verde

Las hipótesis sobre la tonalidad verdosa se multiplican. Según Spaceweather.com, la cercanía al Sol podría estar liberando compuestos raros del núcleo del cometa. Live Science recuerda que el “dicarbono” suele ser la causa de este resplandor en otros cometas, aunque las observaciones espectroscópicas de 3I/ATLAS no han confirmado aún su presencia.

El astrónomo de Harvard Avi Loeb propuso otra explicación: el cianuro. “La producción de cianuro y de níquel sin hierro está aumentando drásticamente a medida que el objeto se acerca al Sol, lo cual explicaría el cambio de coloración”, señaló en su blog, citando datos obtenidos el 25 de agosto por el Very Large Telescope.

Una composición fuera de lo común

Loeb también destacó la peculiaridad química del cometa. Según registros del telescopio Webb y del observatorio SPHEREx, “su coma está dominada por dióxido de carbono, que constituye nada menos que el 87 % de su masa, con trazas de monóxido de carbono (9%) y agua (la mayor parte del 4% restante)”. Una composición muy distinta a la de los cometas del sistema solar.

El cambio tonal del cometa abre debates sobre su composición y origen.
A medida que se acerca al Sol, 3I/ATLAS muestra un verde que desafía explicaciones. | Foto: NASA/JPL-Caltech/REUTERS

Además, su órbita es inusual, pues se alinea con el plano eclíptico planetario, algo que solo ocurre con una probabilidad del 0,2 %, lo que lo convierte en un caso excepcional entre los visitantes interestelares, junto a 1I/ʻOumuamua y 2I/Borisov.

Expectativa por nuevas observaciones

Aunque pronto quedará oculto al pasar detrás del Sol desde la perspectiva terrestre, 3I/ATLAS volverá a hacerse visible antes de su máximo acercamiento a la Tierra en diciembre, cuando se situará a una distancia 700 veces mayor que la Luna.

Para los astrónomos, cada nueva observación será crucial para resolver el enigma cromático y entender mejor la naturaleza de este forastero cósmico. Como concluye Loeb: “La naturaleza no solo es más imaginativa que nosotros, sino que tampoco le importa si lo descubrimos”.

*Con información de DW.