Tecnología
El peligroso error al enviar un correo electrónico que podría vaciar las cuentas bancarias en cuestión de minutos
Antes de enviar cualquier correo electrónico, es importante revisar cuidadosamente que la información sea correcta.
Las amenazas cibernéticas representan una problemática social en constante crecimiento, debido a la evolución de las nuevas tecnologías. Hoy, los usuarios se encuentran en permanente riesgo, ya que sus datos personales y financieros son el principal objetivo de los delincuentes.
En la era digital, el término “ingeniería social” se ha popularizado, refiriéndose a las estrategias de manipulación que utilizan los ciberdelincuentes para obtener información confidencial. Estas tácticas suelen involucrar el engaño de las víctimas, haciéndose pasar por otra persona. Un ejemplo común es la suplantación de identidad, en la cual los delincuentes se hacen pasar por un familiar, amigo o el servicio técnico de una compañía para ganarse la confianza de sus víctimas rápidamente.
Entre los canales más empleados para estos delitos se encuentran llamadas telefónicas, aplicaciones de mensajería instantánea, redes sociales y correos electrónicos. Aunque estas herramientas han transformado la vida cotidiana, también se han convertido en una vía de acceso para los criminales.
Técnicas como el robo de cuentas a través de correos electrónicos, el phishing y el vishing son métodos frecuentes utilizados por los piratas informáticos. Sin embargo, los errores cometidos por los propios usuarios pueden resultar cruciales para su seguridad digital.
Según expertos en tecnología de Computer Hoy, uno de los mayores riesgos, no solo para individuos, sino para empresas, es el envío de correos electrónicos a destinatarios incorrectos. Aunque al principio esto pueda parecer un error menor, en un entorno donde las brechas de seguridad son cada vez más amplias, los datos contenidos en esos correos pueden ser suficientes para realizar actos delictivos.
Este tipo de errores expone accidentalmente información sensible, aumentando el riesgo de robo de identidad, ataques de phishing y violaciones de seguridad, especialmente si los correos incluyen datos como números de cuentas bancarias o contraseñas.
Los expertos advierten que, cuando se envía un correo a un destinatario equivocado, no solo se compromete la privacidad y reputación del remitente, también se crea una oportunidad para que los hackers exploten esa información. Dado que este tipo de errores son de origen humano, prevenirlos resulta complejo.
En este contexto, Gmail, una de las principales plataformas de correo electrónico, ofrece la función de “correos en modo confidencial”, que permite enviar mensajes o archivos de manera segura, evitando que personas no autorizadas accedan a información sensible.
Esta función permite establecer una fecha de vencimiento para los mensajes o revocar el acceso cuando sea necesario. Además, los destinatarios de estos mensajes no podrán reenviar, copiar, imprimir ni descargar el contenido, según lo explicado en el centro de ayuda de Gmail.
“Aunque el modo confidencial ayuda a evitar que los destinatarios compartan accidentalmente tu correo electrónico, no impide que tomen capturas de pantalla o fotos de tus mensajes o archivos adjuntos. Además, aquellos destinatarios que tengan programas maliciosos en su computadora podrían igualmente copiar o descargar los mensajes o archivos adjuntos que envíes”, explica Google desde el centro de ayuda.