Tecnología
El tipo de contraseña que nunca debe tener la red wifi porque podrían hackear su teléfono
Los ciberdelincuentes se muestran cada vez más astutos y logran idear nuevas formas de llevar a cabo diversos delitos informáticos.
Desde que la tecnología se ha consolidado como la herramienta principal de los ciberdelincuentes para llevar a cabo delitos informáticos, los expertos han insistido en la importancia de tomar medidas adecuadas para proteger dispositivos como teléfonos móviles, computadores, tablets, así como servicios en línea, plataformas, redes sociales y cuentas bancarias. Los delincuentes siempre encontrarán formas de vulnerar los sistemas y robar datos personales, lo que hace crucial la adopción de precauciones en todos estos frentes.
Una de las estrategias más efectivas para mitigar los riesgos cibernéticos podría ser tan simple como una contraseña segura. Sin embargo, lo que muchos usuarios desconocen es que una mala elección de contraseñas sigue siendo un error común. La repetición de patrones predecibles pone en peligro la protección de la información confidencial, ya que los atacantes pueden fácilmente descifrar estas combinaciones.
Entre los dispositivos que corren mayor riesgo, la red wifi doméstica es una de las más vulnerables. Este servicio, utilizado por todos los miembros de la familia, puede ser hackeado sin que los usuarios lo perciban, especialmente si la contraseña es débil. Los ciberdelincuentes se aprovechan de contraseñas fáciles de adivinar, como secuencias numéricas o palabras comunes, que resultan simples de descifrar mediante técnicas automatizadas.
Los expertos en seguridad coinciden en que para crear contraseñas robustas es necesario seguir ciertos lineamientos. Según Kaspersky, una de las principales compañías de ciberseguridad, los criminales utilizan tecnologías avanzadas para obtener claves. Aunque muchos usuarios intentan hacerlas difíciles de adivinar, no siempre consideran la eficacia de los algoritmos utilizados por los atacantes, quienes emplean programas diseñados para analizar patrones comunes de elección de contraseñas.
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En este sentido, una contraseña segura debe tener entre 10 y 12 caracteres como mínimo. No obstante, cuanto más larga y compleja sea, más difícil será de descifrar. Es fundamental evitar secuencias como “12345″ o “4567″, así como palabras comunes como “contraseña” o “password”, que los ciberdelincuentes tienen en sus listas de accesos frecuentes. Si alguna de estas combinaciones está en uso, es crucial cambiarla de inmediato para reducir el riesgo de ser hackeado.
Para proteger la red wifi, es recomendable asignar una contraseña única, diferente de la utilizada en otras cuentas o servicios. Aunque recordarla puede resultar complicado, es preferible no anotarla en papel ni almacenarla automáticamente en el navegador o en aplicaciones de notas del celular, ya que esto aumenta el riesgo de exposición.
Crear una contraseña segura no tiene mayor misterio. Se puede lograr mediante una combinación de palabras, caracteres especiales, números y letras en mayúsculas y minúsculas. Las contraseñas más efectivas suelen ser frases aparentemente aleatorias, formadas por palabras no relacionadas y dispuestas en un orden sin sentido. A veces, una frase familiar puede ser modificada de forma que solo el usuario la reconozca, lo que incrementa significativamente su seguridad.
