Astronomía

Este es el asteroide gigante que pasará cerca de la Tierra y preocupa a los científicos: ¿hay riesgo de impacto?

Con una altura de 333 metros, comparable a un rascacielos de más de 100 pisos, su impacto contra la Tierra podría ser catastrófico.

29 de julio de 2025, 1:21 p. m.
Restos de una fallida misión soviética a Venus se dirigen a la Tierra.
Los expertos advierten que existen cuerpos celestes de gran tamaño que podrían escapar a la detección. | Foto: Getty Images

Un nuevo asteroide estaría llamando la atención de los científicos. El llamado como 99942 Apophis, también conocido como el “Dios del caos”, tiene a la comunidad científica en alerta, debido a su gran tamaño y velocidad con la que viaja.

Con una altura de 333 metros, comparable a un rascacielos de más de 100 pisos, su impacto contra la Tierra podría ser catastrófico. Este coloso espacial se desplaza a una velocidad asombrosa de más de 107.000 kilómetros por hora. Aunque su trayectoria no representa una amenaza inmediata, se prevé que pase peligrosamente cerca del planeta el 13 de abril de 2029, a solo 32.000 kilómetros de distancia.

A pesar del constante monitoreo de objetos cercanos a la Tierra, los expertos advierten que existen cuerpos celestes de gran tamaño que podrían escapar a la detección.

Muchos de estos asteroides viajan por zonas cercanas a la órbita de Venus, donde la intensa luminosidad solar dificulta su observación desde la Tierra. Este fenómeno crea una especie de “zona ciega” en el espacio, lo que representa un riesgo considerable, ya que un objeto peligroso podría avanzar sin ser identificado a tiempo.

Por otro lado, la NASA enfrenta otros desafíos en su esfuerzo por proteger al sistema solar de amenazas espaciales. Un ejemplo claro fue la misión DART, en la que una nave fue lanzada para alterar intencionalmente la trayectoria del asteroide Dimorphos.

El asteroide 2024 YR4 tiene un diámetro de 55 metros y un impacto de su tamaño en la Tierra podría ocurrir cada varios miles de años.
Este coloso espacial se desplaza a una velocidad asombrosa de más de 107.000 kilómetros por hora. | Foto: Getty Images

El impacto, a más de 24.000 kilómetros por hora, logró desviar el rumbo del asteroide, cumpliendo el objetivo inicial. Sin embargo, las consecuencias del experimento fueron más complejas de lo previsto, lo que ha generado nuevas interrogantes sobre las posibles implicaciones de futuras misiones de defensa planetaria.

“El impulso adicional sugiere que hubo factores dinámicos desconocidos durante el impacto”, explicó Tony Farnham, astrónomo de la Universidad de Maryland y autor principal del estudio. Además, agregó que, “esto cambia las reglas del juego. Si algún día necesitamos desviar un asteroide que amenaza a la Tierra, no podemos permitirnos pasar por alto estas variables”.

El asteroide que pasó cerca de la Tierra

La NASA encendió las alarmas recientemente al informar sobre la proximidad de un asteroide comparable en tamaño a la Torre de Pisa. Según los astrónomos, este acercamiento representaba un “cuasi accidente”, debido a la corta distancia a la que pasó el objeto, compuesto de materiales rocosos y metálicos.

Este sobrevuelo ocurrió el pasado lunes, 28 de julio, generando inquietud entre los observadores del cielo por su cercanía inusual.

El asteroide fue identificado con el nombre 2025 OW y, de acuerdo con los cálculos, su desplazamiento fue a unos 632.000 kilómetros del planeta, una distancia relativamente corta en términos astronómicos.

La NASA confirma que el asteroide 2024 XN1 se acercará a la Tierra el 24 de diciembre, sin peligros inminentes.
Si alguno de estos objetos llegara a atravesar la atmósfera terrestre y caer sobre una zona habitada, podría provocar daños menores en estructuras. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Aun así, este no sería el único visitante espacial de la semana. Los expertos del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL), que lidera las investigaciones de la NASA sobre objetos cercanos a la Tierra, están analizando el trayecto de otros cuatro asteroides que también se aproximarán en los próximos días.

Aunque la agencia espacial estadounidense aclaró que ninguno de estos cuerpos representa una amenaza directa, también subrayó que su impacto potencial no debe tomarse a la ligera. Si alguno de estos objetos llegara a atravesar la atmósfera terrestre y caer sobre una zona habitada, podría provocar daños menores en estructuras.