Tecnología
La aplicación que debería eliminar de su celular de inmediato porque podrían estar espiando sus conversaciones sin permiso
Esta aplicación terminó siendo una puerta de entrada para prácticas invasivas, al emplear el micrófono del teléfono como herramienta de espionaje.


Al descargar aplicaciones desde la Play Store, muchas personas asumen que estas herramientas son completamente seguras, sin imaginar que algunas pueden incluir amenazas ocultas.
Este fue precisamente el caso de una aplicación que, según investigaciones, durante años estuvo disponible para millones de usuarios de Android. Detrás de su apariencia inofensiva, se escondía un peligroso troyano con capacidad para espiar sin que el usuario lo supiera.

De acuerdo con un informe elaborado por la compañía de ciberseguridad ESET, se trata de iRecorder - Screen Recorder, una aplicación que contenía un código malicioso que permitía grabar fragmentos de audio a través del micrófono del teléfono sin el consentimiento del usuario.
Esta aplicación, en apariencia diseñada para grabar la pantalla del dispositivo, terminó siendo una puerta de entrada para prácticas invasivas, al emplear el micrófono del teléfono como herramienta de espionaje. Su comportamiento violaba gravemente la privacidad de los usuarios sin que estos tuvieran conocimiento alguno.
Lo más leído
El funcionamiento del software malicioso era silencioso, pero eficaz: cada 15 minutos activaba el micrófono del dispositivo para grabar un minuto de audio ambiental, y posteriormente enviaba estos archivos de sonido a servidores externos. Esto significaba que cualquier conversación, sonido o información captada en el entorno del usuario quedaba almacenada sin su consentimiento.
Lo inquietante del caso de iRecorder es que su trayectoria comenzó de manera aparentemente inofensiva, funcionando como una simple herramienta para grabar la pantalla del dispositivo. Durante su primer año disponible en la Play Store, no presentaba indicios de actividad sospechosa.

Sin embargo, fue con la versión 1.3.8 cuando se introdujo de forma encubierta el troyano AhRat, el cual otorgaba acceso remoto al móvil y permitía recolectar información sin que el usuario lo notara. Para entonces, la aplicación ya contaba con la confianza de miles de personas y había superado ampliamente las 50.000 descargas, lo que facilitó la propagación del código malicioso sin levantar sospechas.
Luego de que se hiciera público el informe de ESET, Google tomó medidas y eliminó iRecorder de la Play Store. No obstante, esta acción no protege a quienes todavía la tienen instalada en sus teléfonos, ya que el software malicioso podría seguir operando sin restricciones.
Aunque, más allá de grabar audio en secreto, se comprobó que también podía acceder a imágenes, documentos y otras informaciones privadas almacenadas en el dispositivo. Por ello, los especialistas en ciberseguridad advierten que es urgente desinstalarla para evitar posibles filtraciones o robos de información sensible.
Este caso sirve como recordatorio de que incluso las aplicaciones con buena reputación inicial pueden convertirse en amenazas si los desarrolladores introducen cambios maliciosos con el tiempo.