La forma correcta de bloquear el IMEI de su celular tras ser víctima de robo para proteger los datos bancarios

El robo de celulares ha emergido como una de las principales preocupaciones en la actualidad, debido a que pone en riesgo la información personal y financiera de los usuarios. A menudo, las víctimas se enfrentan a estafas, extorsiones y otros delitos informáticos, cuyo alcance sigue creciendo con el tiempo.

Los delincuentes emplean diversas técnicas para llevar a cabo sus fechorías, siendo las más comunes el robo a mano armada y el “cosquilleo”. Por ello, resulta crucial que los usuarios se mantengan alertas y precavidos, especialmente en los lugares que frecuentan y al guardar sus pertenencias personales.

Las denuncias por este tipo de delitos han aumentado considerablemente, lo que ha llevado a las autoridades a emitir una serie de recomendaciones con el fin de mitigar los daños y prevenir que la información sensible quede expuesta.

Una de las medidas más efectivas es el bloqueo del IMEI, un número único de identificación asignado a cada teléfono móvil, cuyas siglas corresponden a “International Mobile Equipment Identity”. Compuesto por 15 dígitos, actúa como una especie de huella digital para cada dispositivo y se encuentra registrado tanto en el software como en el hardware del equipo, lo que hace casi imposible modificarlo. Al tratarse de un identificador único, juega un papel fundamental en la gestión de redes móviles y en la seguridad de los usuarios.

El bloqueo del IMEI en caso de robo es una medida de seguridad adoptada por las operadoras de telefonía en diversos países. Al realizar este procedimiento, el celular se vuelve inutilizable en cualquier red de la misma operadora, lo que disminuye considerablemente su valor en el mercado negro. Así, incluso si el ladrón cambia la tarjeta SIM del dispositivo, el dispositivo permanecerá bloqueado y no podrá ser utilizado para hacer llamadas, enviar mensajes ni acceder a datos móviles.

Para llevar a cabo este bloqueo, los usuarios deben ponerse en contacto con su operador de telefonía móvil y solicitar la suspensión del dispositivo. Será necesario proporcionar información como el nombre completo, número de identificación, el número de la línea afectada y el lugar del incidente. Una vez hecha la solicitud, el bloqueo se procesará en un máximo de 25 minutos, garantizando que el equipo no pueda ser utilizado por terceros, según explican fuentes de bogota.gov.co.

Además, es imprescindible presentar una denuncia ante la Policía de Bogotá a través de su plataforma oficial para que el incidente quede debidamente registrado.

Datos en riesgo tras el robo de un celular

1. Contraseñas y credenciales de acceso: Los teléfonos suelen almacenar credenciales de acceso a diversas plataformas y servicios en línea, como correos electrónicos, redes sociales, cuentas bancarias y aplicaciones de mensajería. Si un delincuente logra acceder al dispositivo, podría intentar obtener acceso a estas cuentas utilizando las contraseñas guardadas en el teléfono.
2. Datos bancarios y financieros: En la actualidad, muchas personas gestionan sus finanzas a través de aplicaciones bancarias o servicios de pago móvil, los cuales permiten realizar transacciones de dinero, lo que implica que los ladrones podrían tener acceso a las cuentas bancarias, tarjetas de crédito y débito de las víctimas.
3. Fotos y videos personales: El celular también son una de las principales fuentes de almacenamiento de fotos y videos personales. Estos archivos pueden incluir recuerdos importantes, imágenes privadas e incluso fotos sensibles que, si caen en manos equivocadas, podrían ser utilizadas de manera inapropiada.