Tecnología
Los cinco trucos efectivos para limpiar y mantener los electrodomésticos de la casa como nuevos
Prolongar la vida útil de los electrodomésticos no solo ayuda a evitar gastos innecesarios, sino que también mejora su rendimiento diario.

Uno de los errores más comunes en los hogares es postergar la limpieza de los electrodomésticos hasta que muestran fallos o acumulaciones visibles de suciedad. Por ello, aplicar buenos métodos de limpieza es fundamental para mantenerlos en óptimas condiciones.
Los electrodomésticos como refrigeradores, microondas o lavadoras requieren un mantenimiento constante. En el caso del refrigerador, por ejemplo, se recomienda limpiarlo al menos una vez al mes, retirando todos los alimentos y utilizando una mezcla de agua tibia con bicarbonato de sodio para desinfectar sin dañar las superficies. Este sencillo hábito también previene la proliferación de bacterias y la formación de malos olores.
De igual manera, para el caso del horno microondas, colocar un recipiente con agua y rodajas de limón, calentarlo durante cinco minutos y luego pasar un paño seco ayuda a eliminar la grasa acumulada de forma natural y efectiva. Estos pequeños gestos de mantenimiento evitan reparaciones costosas y prolongan la vida útil de los aparatos.
El segundo truco a tener en cuenta es que el uso incorrecto de productos de limpieza es otro de los factores que contribuyen al deterioro prematuro de los electrodomésticos.
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Muchos detergentes o desinfectantes contienen químicos abrasivos que dañan las superficies o componentes internos de los aparatos. Por ello, optar por productos específicos para cada electrodoméstico o recurrir a soluciones caseras menos agresivas debería ser una buena opción.
Además, es importante evitar el uso excesivo de agua, sobre todo en electrodomésticos eléctricos o con componentes electrónicos expuestos, para prevenir cortocircuitos o daños irreparables. La moderación y el uso de paños ligeramente humedecidos son la mejor estrategia para una limpieza segura y eficaz.

Más allá de la limpieza exterior, los electrodomésticos requieren atención en sus partes internas, especialmente los filtros, ventiladores o depósitos ocultos que acumulan suciedad con el tiempo. En electrodomésticos como las lavadoras o lavavajillas, los filtros deben revisarse y limpiarse al menos una vez al mes. La acumulación de residuos no solo reduce la eficiencia del aparato, sino que también puede generar malos olores y obstrucciones que afectan su funcionamiento.
Por otro lado, las aspiradoras necesitan un mantenimiento similar. Vaciar regularmente el depósito y limpiar los filtros garantiza un mejor rendimiento de succión y prolonga la vida útil del motor. Invertir unos minutos en estas tareas de mantenimiento puede marcar una gran diferencia a largo plazo.

La ubicación de los electrodomésticos dentro del hogar también influye en su durabilidad. Colocarlos en espacios con buena ventilación y lejos de fuentes de calor excesivo ayuda a evitar sobrecalentamientos que desgastan los componentes internos.
El refrigerador, por ejemplo, necesita al menos cinco centímetros de separación respecto a la pared para permitir una correcta circulación de aire. De igual forma, los hornos eléctricos deben estar alejados de objetos inflamables y tener suficiente espacio alrededor para disipar el calor.
Además, revisar periódicamente que las salidas de ventilación no estén obstruidas por polvo o suciedad, ya que esto puede provocar un aumento de temperatura interno que afecte el funcionamiento del aparato.
Finalmente, aunque la limpieza regular es esencial, también es recomendable programar revisiones técnicas periódicas. Muchos fabricantes sugieren realizar un mantenimiento preventivo una o dos veces al año para garantizar que los electrodomésticos funcionen correctamente.
Estas verificaciones permiten detectar a tiempo posibles fallos o desgastes que, si se atienden de forma preventiva, evitan averías mayores. Además, contar con la asistencia de técnicos especializados asegura una limpieza profunda y segura de las partes internas más delicadas.