Tecnología
Los tres electrodomésticos que pueden quedar inservibles tras un corte de luz repentino
Los cortes de luz pueden generar molestias y consecuencias importantes dependiendo de su duración y alcance.

Los cortes de luz, también conocidos como apagones, son situaciones en las que se interrumpe el flujo de energía eléctrica hacia una zona específica o de manera generalizada. Dicho fenómeno puede prolongarse desde unos pocos minutos hasta varias horas, o incluso días, dependiendo de la magnitud del problema y de las condiciones locales.
Las causas de estos cortes pueden ser diversas. La red de distribución eléctrica está constituida por una compleja infraestructura de cables, transformadores, subestaciones y otros componentes. Cualquier falla en alguno de estos elementos, debido al envejecimiento de los equipos o a la falta de mantenimiento, puede ocasionar la interrupción del suministro. En tales circunstancias, es necesario suspender temporalmente el servicio para proceder con las reparaciones correspondientes.
Asimismo, fenómenos meteorológicos como tormentas, huracanes, nevadas, rayos o vientos fuertes pueden afectar negativamente la infraestructura eléctrica. Los árboles caídos, las líneas eléctricas dañadas o los cortes provocados por rayos son factores que pueden generar apagones. Igualmente, las lluvias intensas o la nieve pueden impactar tanto las líneas aéreas como las subterráneas.

Aunque estas situaciones son impredecibles y pueden ocasionar diversos inconvenientes en los hogares, los electrodomésticos, al depender de la electricidad para su funcionamiento, son particularmente vulnerables a los efectos de las interrupciones en el suministro eléctrico.
Electrodomésticos susceptibles a daños durante una tormenta eléctrica
Refrigeradores y congeladores
Estos aparatos están diseñados para mantener los alimentos a temperaturas bajas, con el fin de evitar su descomposición. Durante un corte de energía, la temperatura interna de estos dispositivos comienza a ascender, lo que puede generar el deterioro rápido de los alimentos si la interrupción se prolonga. El impacto de un corte de luz varía según su duración y la cantidad de alimentos almacenados. Si el apagón es breve, es probable que no se vea afectado significativamente el contenido; sin embargo, si dura varias horas, los alimentos congelados pueden descongelarse y volverse inseguros para su consumo.
Equipos electrónicos
Los equipos electrónicos, tales como televisores, computadores y consolas de videojuegos, son especialmente sensibles a las fluctuaciones de voltaje que suelen ocurrir al restablecerse el suministro eléctrico. La reanudación del servicio puede generar picos de corriente que dañan los circuitos internos, lo que puede ocasionar sobrecargas en las placas base o quemaduras en componentes delicados, resultando en fallos irreparables o en la pérdida total de la funcionalidad del dispositivo.

Calentadores de agua
Durante un corte de luz, los calentadores de agua dejan de operar, pero el daño potencial se presenta cuando la electricidad es restaurada. Al reanudarse el suministro, estos aparatos pueden verse afectados si la corriente es inestable, ya que los picos de voltaje pueden perjudicar los circuitos internos y las resistencias de dichos dispositivos.
Aunque todos los electrodomésticos pueden resultar afectados por cortes de luz, aquellos que son esenciales para el bienestar de las personas, como los que están destinados al almacenamiento de alimentos, son los más vulnerables. Además, dispositivos electrónicos y sistemas de bombeo de agua también pueden sufrir daños o perder su funcionalidad. Para minimizar los efectos de un apagón inesperado, es recomendable contar con sistemas de respaldo adecuados.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.