¿Por qué el calentador de agua no prende? Estas son las principales razones

En la mayoría de casas, y con la masificación del servicio de gas natural, es muy común ver calentadores de paso o instantáneos, los cuales reemplazaron a los viejos aparatos que almacenaban agua en su interior y que debían conectarse durante la noche anterior para poder disfrutar de agua caliente.

Sin embargo, estas máquinas no están exentas de sufrir algún daño o avería que impidan que su funcionamiento sea óptimo y lleven a que el calentador no encienda justo cuando se necesita.

Aunque es posible que falle alguno de los múltiples repuestos, son más comunes unos daños que otros, por lo que hay que prestar atención a las señales que emite el propio aparato y que pueden dar una pista de lo que está sucediendo y de por qué no prende cuando se abre el grifo del agua caliente.

Los expertos de la compañía Suner, con amplia trayectoria en el mantenimiento de estos aparatos en España, indican en su blog algunas de las razones y posibles soluciones que se pueden poner en práctica para salir adelante y solucionar el problema.

Razones por las que no prende un calentador de agua

Lo primero que hay que hacer es analizar la situación y comenzar a intentar llegar a la razón de la avería, descartando las posibilidades más sencillas y caminando hacia las más complejas.

• Desgaste de las baterías: esas pueden haber cumplido su ciclo de vida o los puntos de contacto se pudieron haber sulfatado debido a la humedad. La solución pede ser cambiar las pilas o limar, suavemente, los polos del espacio donde van instaladas.
• Problemas con el suministro de gas: se hace necesario revisar que el suministro de gas sea el adecuado en el hogar. Verifique las conexiones y compruebe que está llegando suficiente combustible al calentador.
• Hay falta de presión en la instalación hidráulica de la casa: es necesario revisar la presión con la que el agua llega al calentador; será necesario verificar la ubicación del tanque, la altura o la bomba de presurización que envía el líquido al dispositivo.

Aunque estas son las fallas más comunes y que se pueden corroborar sin ser un experto, hay otras que sí necesitan un mayor conocimiento en el tema y una serie de herramientas y repuestos para solucionar el problema.

Recuerde que de no saber qué hacer, lo prudente es llamar a un técnico, pues no solo se puede provocar un escape de agua que arruine muebles y afectar a otras viviendas, sino una fuga de gas que ponga en riesgo la vida de los residentes y vecinos del lugar.

Calentador de agua o ducha eléctrica: ¿cuál es la mejor opción en cuanto al costo y beneficio?

Los calentadores pueden ser más económicos a largo plazo, especialmente si se trata de un hogar con varios miembros, ya que permite tener agua caliente disponible en todo momento. Sin embargo, su instalación y mantenimiento, dependiendo el modelo del calentador, puede o no ser costoso.

Por otro lado, las duchas eléctricas son aparatos compactos que se instalan directamente en el baño. Estos equipos calientan el agua instantáneamente al pasar por un dispositivo de calentamiento eléctrico. Las duchas eléctricas son fáciles de instalar, no requieren un tanque de almacenamiento y ofrecen la ventaja de calentar el agua de manera rápida y precisa.

Sin embargo, a la hora de elegir entre un calentador y una ducha eléctrica, es importante considerar algunos aspectos clave:

• Consumo energético: Los calentadores de agua tradicionales pueden ser más eficientes a la hora de consumir energía en comparación con las duchas eléctricas, especialmente si se trata de sistemas de alta capacidad que sirven a múltiples puntos de uso, como el baño o la cocina. Las duchas eléctricas, por su sistema, siempre consumirán más en comparación de los calentadores eléctricos. Los calentadores a gas, por el contrario, son los que menos consumen.
• Costo de instalación: Los calentadores de agua tradicionales pueden requerir una instalación más compleja debido a la necesidad de un punto fijo para el de paso o de tanque y, en algunos casos, tuberías adicionales si se trata de construcciones más antiguas. Sin embargo, las edificaciones nuevas ya traen un espacio destinado para su instalación y no hay tubería a la vista. Por su parte, las duchas, aunque no requieren mayor instalación que conectarla a la fuente eléctrica, tiene una vida útil corta corta dependiendo la marca.
• Suministro de agua: Los calentadores de agua tradicionales pueden proporcionar un suministro constante de agua caliente, incluso si se usan múltiples puntos de uso. La ducha eléctrica, por su lado, requiere una presión constante para que mantenga la temperatura.