Tecnología
Que no le pase, estas dos cosas son las que nunca debe hacer con una SIM card en su teléfono
Dos errores frecuentes con la SIM podrían dejar inservible el celular.
Realizar el cambio de operador móvil es una práctica común, sobre todo cuando se busca mejorar tarifas o servicios. Para ello, es necesario extraer la tarjeta SIM del dispositivo y colocar una nueva.
Sin embargo, lo que parece una tarea sencilla puede convertirse en un riesgo para el teléfono si se ejecuta de forma incorrecta.
Un mal movimiento puede dañar componentes internos, afectar el funcionamiento del móvil e incluso hacer que pierda la garantía.
Manipular mal la SIM puede arruinar el teléfono
Uno de los errores más frecuentes al intentar extraer la tarjeta SIM es el uso de herramientas inapropiadas.
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Aunque pueda parecer lógico utilizar objetos delgados como agujas, destornilladores o cuchillas, este tipo de elementos podría provocar daños irreversibles en los conectores internos del lector de SIM o incluso rayar e incluso dañar la tarjeta.
La marca Lenovo advierte que estas prácticas pueden afectar no solo el hardware, también el acceso a la información almacenada en la tarjeta.
En dispositivos con batería no removible, una mala maniobra también podría generar un cortocircuito.
Otro fallo común es sacudir el celular con fuerza con la esperanza de que la SIM se deslice o salga sola. Esta acción puede empeorar la situación, haciendo que la tarjeta quede aún más atascada o, en el peor de los casos, se fracture dentro de la ranura.
La forma correcta de extraer una SIM sin poner en riesgo su equipo
Forzar la salida de la SIM no solo puede comprometer el funcionamiento del dispositivo, sino invalidar su garantía.
En caso de inspección técnica, cualquier marca de maltrato, rayón o intento de extracción violenta podría ser motivo suficiente para que el fabricante se niegue a reparar el teléfono sin costo.
Frente a esto, Lenovo propone una solución mucho más segura en caso de no contar con la llave que usualmente entregan con los celulares: emplear un pequeño trozo de cinta adhesiva adherido al extremo de un palillo o una pinza de depilar.
Esta herramienta casera puede insertarse cuidadosamente en la ranura hasta que toque la superficie de la SIM. Basta con presionar suavemente para que la cinta se adhiera y luego tirar lentamente hasta extraerla.
En situaciones donde la tarjeta esté completamente introducida y sea imposible acceder a ella visualmente, una opción es utilizar una lámina plástica delgada, que permite maniobrar con precisión sin comprometer los componentes internos del teléfono.
Aunque cambiar de operador móvil o reemplazar la SIM parezca una operación simple, hacerlo de forma incorrecta puede tener consecuencias costosas.
La clave está en evitar herramientas inapropiadas, no aplicar fuerza y utilizar métodos suaves y controlados. Con precaución y las herramientas adecuadas, es posible realizar este procedimiento sin poner en riesgo la funcionalidad del dispositivo.
