Tecnología
Qué tan seguro es comprar seguidores en Instagram tras cambios obligatorios en los requisitos para hacer lives
Instagram restringe los lives y crece la polémica sobre los seguidores comprados.

Un reciente ajuste en las políticas de Instagram cambió las reglas para quienes desean hacer transmisiones en vivo.
A partir de ahora, solo las cuentas públicas con al menos mil seguidores podrán acceder a esta función, lo que ha encendido nuevamente el debate sobre la práctica de comprar seguidores para lograr visibilidad.
La medida, anunciada por Meta, busca reforzar el control sobre el uso de la plataforma, pero ha generado inquietud entre usuarios que no cumplen el nuevo umbral.
En ese contexto, algunos consideran la opción de adquirir seguidores como una vía rápida para alcanzar ese mínimo requerido.
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Sin embargo, esta práctica conlleva riesgos considerables que han sido advertidos por especialistas.
Nuevos requisitos: cantidad de seguidores y tipo de cuenta
El sitio especializado TechCrunch informó que Instagram ya no permitirá iniciar lives a usuarios con cuentas privadas o con menos de 1.000 seguidores.
Hasta la implementación de este cambio, cualquier persona podía hacer transmisiones sin importar el tamaño de su comunidad. Ahora, quienes no cumplan los nuevos criterios quedan excluidos de esta herramienta clave para la visibilidad digital.

El nuevo umbral ha generado un aumento en la búsqueda de alternativas para crecer en la plataforma.
Una de las más comunes es la compra de seguidores a través de servicios que prometen ampliar rápidamente la base de audiencia. Pero detrás de esa aparente solución hay numerosos problemas que pueden poner en riesgo la cuenta.
Expertos advierten desventajas al comprar seguidores
De acuerdo con ADSLZone, adquirir seguidores puede traer consecuencias negativas, tanto a nivel técnico como de seguridad.
Uno de los mayores riesgos es el uso de aplicaciones de terceros que Instagram bloquea con frecuencia por emplear bots para generar likes o inflar cifras de manera artificial.
Los expertos señalan que hay dos métodos comunes de compra: adquirir seguidores de forma masiva o mediante entregas programadas que agregan usuarios poco a poco. En ambos casos, el impacto real suele ser escaso.
La interacción genuina con el contenido no mejora, lo que termina afectando el alcance y la reputación de la cuenta.

Además, estas prácticas exponen a los usuarios a fraudes. ADSLZone advierte que, en el peor de los casos, no solo se pierde el dinero invertido, sino el control de la cuenta, o esta puede ser sancionada e incluso cerrada por Instagram.
Asimismo, es importante tener en cuenta que algunas páginas pueden robar credenciales de acceso o incluso datos bancarios al momento del pago.
Otro factor preocupante es la naturaleza de los seguidores adquiridos: muchos son bots o cuentas inactivas, aunque algunos servicios ofrecen usuarios reales.
Sin embargo, estos tampoco garantizan interacción, lo que hace evidente ante el algoritmo que se trata de crecimiento no orgánico.