Si este objeto está cerca de su router wifi, aléjelo de inmediato porque disminuye la velocidad del internet

Contar con una buena conexión a internet es fundamental, ya que de ello depende en gran medida la eficiencia y productividad de las personas en su día a día. El trabajo, el estudio, el acceso a la información y la comunicación dependen en gran medida de esta herramienta; de lo contrario, la experiencia puede volverse frustrante.

Frecuentemente, cuando se presentan errores de conexión, lo primero que se considera es un fallo en el proveedor del servicio. Sin embargo, no siempre es así; en muchos casos, los problemas pueden estar relacionados con interferencias de objetos cercanos que afectan la señal, como ocurre con los espejos.

Se habla a menudo de los inconvenientes que los electrodomésticos pueden causar cuando se encuentran cerca del enrutador, pues estos dispositivos funcionan mediante ondas electromagnéticas, algunas de las cuales coinciden o se superponen con las frecuencias utilizadas por el wifi, que generalmente opera en dos bandas: 2.4 GHz y 5 GHz.

Muchos aparatos contienen materiales metálicos en su estructura, como es el caso de los microondas o la parte exterior de los refrigeradores. El metal actúa como una barrera para las señales de radio, bloqueando o reflejando las ondas wifi, lo que dificulta la comunicación entre el router y los dispositivos conectados.

Además, electrodomésticos de gran tamaño, como los refrigeradores y las estufas, suelen estar ubicados en áreas que requieren que la señal atraviese varias paredes y otros objetos, lo que complica aún más la propagación de las ondas y disminuye la calidad de la conexión.

Según detallan en Computer Hoy, los espejos y otras superficies reflectantes son los principales enemigos del enrutador. Aunque estos objetos suelen formar parte de la decoración del hogar, en realidad, interfieren con el trayecto de las ondas emitidas por el router, impidiendo que la señal se distribuya de manera uniforme por toda la casa. Las ondas de radio, al igual que las ondas de luz, tienen la capacidad de reflejarse cuando encuentran una superficie capaz de hacerlo.

Los espejos y las superficies metálicas son particularmente eficaces para reflejar ondas, ya que estos materiales son buenos conductores de electricidad. Así, cuando una señal encuentra un espejo o una superficie metálica, como una pared de acero o una ventana con una capa metálica, la onda puede rebotar de manera similar a como lo haría la luz en un espejo convencional.

Este fenómeno de reflexión puede hacer que la señal de internet no llegue directamente a su destino, sino que se desvíe en diversas direcciones. Como resultado, la intensidad de la señal disminuye, lo que, en muchos casos, conlleva a una reducción en la velocidad de la conexión.

Aunque es prácticamente imposible evitar por completo la interacción de las ondas de radio con superficies reflectantes, existen diversas estrategias que pueden ayudar a minimizar su impacto:

1. Ubicar el enrutador en una posición central: Esto facilita una mejor distribución de la señal y reduce los efectos de las reflexiones y absorciones causadas por los espejos.
2. Evitar superficies metálicas cercanas al enrutador: Colocar el enrutador alejado de espejos grandes, puertas metálicas o electrodomésticos con superficies reflectantes puede mejorar la calidad de la señal.
3. Utilizar repetidores o amplificadores de señal: Estos dispositivos amplifican la cobertura en áreas donde la señal wifi se ve afectada por interferencias.
4. Implementar una red de malla: Este sistema conecta varios puntos de acceso para garantizar una señal más estable y menos afectada por obstáculos físicos.