El televisor se ha consolidado como uno de los electrodomésticos más relevantes del hogar, ya que cumple un papel central en el entretenimiento diario de los usuarios.
Actualmente, no solo permite ver programas o películas, también reproducir música, acceder a plataformas digitales y disfrutar videojuegos en línea.
Esta versatilidad se potencia con los Smart TV, que incorporan conexión a internet y funciones avanzadas que amplían sus posibilidades de uso.
Sin embargo, uno de los errores más frecuentes es apagar el televisor de forma inadecuada. Por practicidad, algunas personas optan por desconectarlo directamente del tomacorriente, sin pasar antes por el apagado normal.
Desde el punto de vista técnico, esta práctica no es aconsejable, ya que puede generar alteraciones eléctricas que afecten los circuitos internos del equipo.

Los televisores modernos integran tecnologías delicadas que no están diseñadas para cortes de energía constantes. La desconexión repetida y brusca puede afectar el rendimiento general del dispositivo, deteriorar la calidad de la imagen y acortar la vida útil de componentes clave que requieren un apagado progresivo y controlado.
Esta situación es aún más relevante en ciertos modelos que utilizan procesos automáticos para mantener la uniformidad de la pantalla.
Estos ciclos ayudan a conservar la integridad de los píxeles y a garantizar una experiencia visual estable con el paso del tiempo. Interrumpirlos de manera abrupta puede afectar directamente la homogeneidad de la imagen.

Además, al cortar la energía de forma repentina, los sistemas internos no alcanzan a finalizar correctamente sus procesos, de acuerdo con el portal Xataka.
Esto puede ocasionar daños en la fuente de alimentación, errores en la memoria interna o fallas en el software, especialmente si el televisor estaba guardando ajustes o actualizando su sistema. Con el tiempo, esta práctica incrementa el riesgo de averías y reduce significativamente la durabilidad del equipo.
Para evitar daños irreparables, expertos recomiendan apagar siempre el televisor utilizando el mando a distancia o el botón de encendido antes de desconectarlo de la corriente. De esta forma, protege tanto el televisor como el hogar, garantizando su funcionamiento óptimo a largo plazo.

Asimismo, aconsejan emplear reguladores o protectores de tensión, ya que contribuyen a mantener estable el suministro eléctrico y a proteger el equipo frente a variaciones inesperadas de corriente.
De igual forma, durante tormentas eléctricas o periodos largos fuera de casa, lo más recomendable es desconectar los aparatos electrónicos, asegurándose previamente de que estén correctamente apagados.










