Tecnología
Si tiene paneles solares en casa, evite este fallo absurdo que podría dañar el sistema antes de tiempo
Cuidar los paneles solares exige un mantenimiento constante que, de descuidarse, podría causar fallas graves o reducir su eficiencia.


Los paneles solares se han convertido en una de las alternativas energéticas más atractivas para los hogares. No solo porque representan un ahorro considerable en la factura de electricidad, sino que también contribuyen a la sostenibilidad del medio ambiente.
Sin embargo, la inversión que representan estas instalaciones requiere de cuidados específicos para garantizar su vida útil. Uno de los errores más comunes, y al mismo tiempo más absurdos, está relacionado con un hábito que muchas personas pasan por alto y que podría afectar gravemente la eficiencia del sistema.

Muchas veces, este tipo de fallos no suele estar en la tecnología ni en la calidad de los equipos, sino en el descuido humano. Mantener los paneles solares en buen estado implica más que la simple instalación; también requiere de un seguimiento adecuado que, si se ignora, puede traducirse en daños irreversibles o en un rendimiento muy por debajo de lo esperado.
De acuerdo con el sitio web Energynews.es, estas estructuras dan la impresión de ser firmes, pero lo cierto es que las placas no están diseñadas para soportar el peso humano, ni siquiera de manera parcial. Pisar o ejercer presión puede generar microfisuras casi imperceptibles, pero capaces de afectar el rendimiento y provocar fallas con el tiempo.
Estos pequeños daños suelen transformarse en puntos calientes que deterioran seriamente las celdas y reducen la vida útil del sistema. Por eso, ni siquiera los técnicos especializados deberían subirse encima de los paneles.
Para la limpieza y el mantenimiento existen herramientas seguras como pértigas, grúas o arneses. Al final, cuidar un panel solar es tan importante como cuidar una ventana: si se rompe, las consecuencias no serán solo estéticas, sino también económicas.

Además de la limpieza y el uso adecuado, los expertos insisten en que uno de los pilares para mantener en buen estado un sistema de energía solar es el monitoreo constante. Muchos hogares cuentan con aplicaciones o dispositivos que permiten revisar, en tiempo real, la cantidad de energía que se está generando y consumiendo. Por lo que, ignorar esta herramienta es otro error frecuente que puede derivar en fallos más graves.
Un monitoreo constante ayuda a detectar anomalías a tiempo. Por ejemplo, si un panel presenta un descenso notable en la producción, puede ser una señal de que está sucio, que existe una sombra permanente sobre él o que el inversor no está funcionando correctamente. Por ello, cuanto más rápido se identifique el problema, más fácil será corregirlo y evitar daños mayores.