Tecnología
Si tiene un lavavajillas en su cocina, procure no introducir estos utensilios porque podría causar daños en el electrodoméstico
La mayoría de estos aparatos eléctricos cuentan con un manual de funciones que debe revisarse antes de realizar acciones que puedan dañarlos.

El mundo de los electrodomésticos es tan amplio que, en muchas ocasiones, las personas se limitan a los básicos sin explorar más allá. Los más populares suelen ser la nevera, la lavadora, el televisor, la aspiradora, la freidora de aire o el microondas, elementos fundamentales en las tareas cotidianas del hogar. Sin embargo, en los últimos años la lista se ha expandido, incorporando aparatos que facilitan aún más la vida diaria, especialmente en la cocina.
El lavavajillas es un claro ejemplo, ya que permite limpiar la loza de manera rápida y sencilla, sin mayor esfuerzo, lo que se traduce en un ahorro de tiempo al momento de dejar la cocina en orden.
Además de esta practicidad, una de sus funciones más destacadas es la de desinfectar platos, cubiertos, vasos, ollas, sartenes y otros utensilios que se ensucian a lo largo del día.

No obstante, pese a su eficiencia y a las tecnologías avanzadas con las que están diseñados, existen ciertos objetos que no deberían introducirse en el lavavajillas, pues pueden afectar su vida útil y dañar componentes esenciales para su funcionamiento.
De acuerdo con el portal especializado tien21.es, los primeros en la lista son los utensilios fabricados en madera, como tablas para cortar alimentos, ensaladeras o cubiertos. Este material tiende a hincharse al entrar en contacto con el agua, lo que puede provocar que se rompa o se astille. Asimismo, representa un riesgo para la salud, dado que pequeñas astillas podrían quedar adheridas a los alimentos y causar lesiones en la boca o la garganta.
Otro caso son los objetos de silicona, los cuales solo deberían colocarse en el lavavajillas si la etiqueta del fabricante especifica que están diseñados para resistir este tipo de lavado. Incluso en esos casos, es recomendable retirar previamente cualquier residuo adherido para evitar inconvenientes durante la limpieza.

También se debe tener especial cuidado con los cristales frágiles y sensibles, que pueden quebrarse debido a la presión o temperatura del lavavajillas. Esto no solo supone el riesgo de contaminar los demás utensilios con fragmentos de vidrio, sino que, con el tiempo, estos materiales también pueden perder brillo.
Introducir estos objetos no aptos en el lavavajillas puede acelerar su deterioro y reducir su funcionalidad. Por ello, siempre conviene revisar las recomendaciones del fabricante y, en caso de duda, optar por el lavado a mano. De esta manera se prolonga la vida de los utensilios y se garantiza el buen estado del electrodoméstico.