Tecnología

Tres números de celular que debe tener presente en su teléfono para salvarse de ser víctima de estafas

Tres prefijos internacionales están siendo usados para estafas que buscan tomar el control de cuentas como WhatsApp.

2 de julio de 2025, 10:57 p. m.
Expertos alertan sobre llamadas extranjeras que buscan obtener datos bancarios y contraseñas.
Mediante tecnología VoIP, los estafadores usan números internacionales para engañar a sus víctimas. | Foto: Getty Images

En los últimos meses, se ha incrementado la aparición de llamadas desde números internacionales con prefijos poco comunes como +32 (Bélgica), +31 (Países Bajos) y +359 (Bulgaria). Aunque a simple vista pueden parecer comunicaciones legítimas desde el extranjero, en realidad se trata de una nueva modalidad de fraude que busca apropiarse de datos personales y vulnerar cuentas como la de WhatsApp.

Según reportes de especialistas en ciberseguridad, el uso de estos números no es casual. Las personas que reciben este tipo de llamadas, sin tener relación alguna con dichos países, podrían estar siendo blanco de una estrategia delictiva bien estructurada.

Tecnologías que permiten el engaño y métodos utilizados

Los ciberdelincuentes emplean sistemas de telefonía sobre internet, conocidos como VoIP (Voz sobre IP), que facilitan la falsificación de números telefónicos. Esta tecnología les permite proyectar un número con código internacional, ocultando así la verdadera procedencia de la llamada.

Una vez que el usuario responde, los estafadores fingen ser representantes de entidades confiables para obtener información confidencial, como claves de acceso, códigos de autenticación o datos financieros.

El prefijo +351 corresponde a Portugal, y aunque muchas llamadas o mensajes que provienen de este país son legítimos, es crucial estar alerta ante posibles fraudes.
El uso de números virtuales con prefijos extranjeros permite a redes criminales ocultar su ubicación y ejecutar fraudes telefónicos. | Foto: Getty Images

En algunos casos, también utilizan la técnica conocida como “llamada perdida internacional” o ping call, que consiste en generar una llamada muy breve para que la víctima, al devolverla por curiosidad, termine pagando tarifas elevadas e incluso confirmando que su número se encuentra activo para futuros intentos de fraude.

Los expertos advierten que la proliferación de estas prácticas se debe, en gran parte, a la facilidad con la que hoy se pueden crear números virtuales con apariencia internacional. Empresas como Aircall explican que estas herramientas permiten establecer conexiones entre regiones sin mostrar el verdadero origen, lo que ha sido aprovechado por redes criminales para actuar con mayor sigilo.

Qué buscan los estafadores y cómo protegerse

El objetivo principal de estas llamadas es obtener datos personales sensibles, entre ellos:

  • Números de cuenta bancaria y contraseñas.
  • Códigos de tarjetas de crédito o débito.
  • Direcciones de residencia, fechas importantes o información familiar.
  • Accesos a redes sociales o plataformas de mensajería como WhatsApp.
Delincuentes suplantan entidades bancarias y engañan con datos personales reales en llamadas falsas.
El fraude telefónico apunta directamente a robar accesos a WhatsApp, redes sociales y datos financieros. | Foto: Getty Images

Para protegerse de este tipo de estafas, las recomendaciones incluyen:

  • No contestar llamadas internacionales desconocidas, especialmente si provienen de países con los prefijos mencionados.
  • No devolver llamadas perdidas de números sospechosos.
  • Evitar compartir información personal por teléfono, incluso si la llamada parece provenir de una entidad oficial.
  • Activar la verificación en dos pasos en aplicaciones como WhatsApp y otras cuentas digitales.
  • Reportar el número a su proveedor de telefonía o a entidades de protección al consumidor, en caso de recibir llamadas sospechosas.

Identificar los signos de alerta y tomar medidas preventivas puede marcar la diferencia entre estar seguro o convertirse en una víctima más del cibercrimen global.