Turismo
El municipio del Valle del Cauca conocido como ‘tierra de vida serena’, un lugar donde abundan las famosas “solteritas”
Este encantador pueblo se encuentra a 156 kilómetros de Cali.

Con su combinación de cultura, naturaleza, gastronomía y aventura, el departamento del Valle del Cauca, en Colombia, se consolida como un destino recomendado para visitar, especialmente para aquellos que buscan desafiar miedos y adentrarse en un espacio lleno de joyas por descubrir en medio de paisajes de ensueño.
La diversidad paisajística de este territorio se ve reflejada en las imponentes montañas de los Farallones de Cali, valles fértiles y el espectacular Pacífico colombiano con playas como Juanchaco y Ladrilleros, hasta lagos como el Lago Calima, ideal para deportes acuáticos.
Para los amantes de la historia y la cultura, recorrer sus pueblos significa sumergirse en un viaje al pasado a través de su arquitectura colonial, calles empedradas y una vibrante vida cultural que ofrece experiencias llenas de aprendizajes.
Entre esos lugares llenos de encanto se encuentra el municipio La Victoria, conocido como ‘tierra de vida serena’. Aunque es uno de los menos explorados del Valle del Cauca, se trata de esos tesoros ocultos en el país que sorprende con su riqueza natural digna de admirar.
Lo más leído

Esta población está ubicada exactamente sobre la margen derecha del río Cauca y respecto al origen de su nombre, según datos consignados en la página de la Gobernación del Valle, fue bautizado de esta manera el 23 de diciembre de 1850, fecha en que la iglesia católica conmemora la fiesta de Santa Victoria.
No obstante, antes llevaba el nombre de La Cañada y poco tiempo después se llamó San José, hasta que finalmente y hasta el día de hoy, es reconocido como La Victoria.
La Victoria, donde lo religioso y natural se mezcla
El turismo en el municipio se centra principalmente en el ámbito religioso, destacando la devoción mariana y el Santuario de San José, una construcción de época colonial erigida desde la fundación del municipio (cuando llevaba el mismo nombre) y reconocida como patrimonio cultural de Colombia.
También sobresale el templo ubicado en la cabecera municipal y la imagen de Nuestra Señora de Todos los Santos, catalogadas como parte de las reliquias más importantes del pueblo.
Un plan imperdible en este lugar vallecaucano es la degustación del tradicional ponche, las empanadas de cambray, el pandeyuca y las “solteritas”, un dulce tradicional hecho de harina de trigo y frito como los churros, con la diferencia de que éstas tienen la forma de una estrella y tienen una cobertura de dulce que rebosa sus bordes.

Por último, se resalta su oferta hotelera que se ha venido fortaleciendo en los últimos años, todo con el objetivo de brindar una experiencia mucho más agradable a sus visitantes.
Desde el sitio web de la Alcaldía Municipal, lo describen como un “paraíso de amplios paisajes, calles pequeñas y gente hermosa” que, pese a ser pequeño, su ambiente tranquilo lo convierten en un lugar ideal para quienes buscan descansar del bullicio de las grandes ciudades.