Turismo
El refugio natural cerca de Bogotá ideal para desconectarse y respirar aire puro
Le compartimos algunas recomendaciones para vivir una experiencia más agradable en este destino durante su visita.

A pocos kilómetros de Bogotá, la capital colombiana, es posible disfrutar diferentes caminatas ecológicas, perfectas para desconectarse, respirar aire puro y sentir la magia de la naturaleza en escenarios llenos de vida y colores.
Entre esos destinos que ofrecen senderos ideales para escapar del bullicio de la ciudad se encuentra el Páramo de Ocetá, un refugio natural único ubicado en el municipio de Monguí, uno de los Pueblos Patrimonio de Colombia, considerado por muchos viajeros como uno de los municipios más lindos del departamento de Boyacá.
El paisaje de este páramo está adornado con frailejones, musgos y líquenes, entre otras plantas que lo convierten en un paraíso imperdible y perfecto para experimentar una conexión profunda con la naturaleza.
Para llegar a este lugar, según explica el portal oficial de turismo Colombia Travel, los visitantes debes realizar una caminata que dura de tres a cuatro horas desde Monguí.
Además, agrega que en el ascenso los viajeros pasan por la llamada ‘ciudad perdida’, un conjunto de formaciones rocosas de 15 metros de altura.

Como si fuera poco, también se pueden ver cascadas, manantiales y animales como venados de cola blanca y cóndores, aspectos que convierten esta experiencia en un recuerdo inolvidable.
Recomendaciones para visitar esta maravilla natural de Colombia
Si desea conocer este atractivo turístico natural, es fundamental que tenga en cuenta algunas recomendaciones clave para garantizar una experiencia más agradable.
- Llevar ropa adecuada para el clima de páramo.
- Empacar en una maleta pequeña prendas esenciales como impermeable, chaquetas, crema o bloqueador para la cara, gorros y guantes.
- Llevar un conjunto de repuesto.
- No olvidar la cámara fotográfica o el dispositivo móvil con buena carga.
- Tener a la mano algunos snacks
- No dejar basura en ningún rincón de este lugar. Recuerde que se trata de un refugio natural que alberga diferentes especies de plantas y animales por los que es necesario contribuir con su conservación y cuidado.
- No contaminar las fuentes de agua.
- Ir en compañía de un guía local para mayor seguridad.

La vía de acceso para visitar el Páramo de Ocetá inicia por detrás de la basílica de Monguí. Desde este punto el recorrido puede durar aproximadamente 3 horas.
Cabe mencionar que este lugar posee un mágico espectáculo que siempre cautiva a quienes lo visitan, despertando unas ganas inmensas por regresar y disfrutar de cada uno de sus atractivos: flora, fauna y la Ciudad de Piedra, nombre que los campesinos le dieron a su zona rocosa que, con el tiempo, se ha convertido en callejones que asemejan a una pequeña ciudad, destaca la organización Colparques en su sitio web.
¿Preparado para vivir esta experiencia? Anímese a crear nuevos recuerdos en esta maravilla natural.