Santorini, ahora mismo un infierno en medio del paraíso: “no creemos que ocurra algo catastrófico”

El primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, de visita este viernes en Santorini (Grecia), uno de los lugares más anhelados en el mundo por turistas, descartó un escenario catastrófico para esta isla turística, que experimenta una intensa actividad sísmica, un fenómeno sin precedentes que hasta ahora no causó víctimas ni daños. “No creemos que ocurra algo catastrófico”, dijo al término de una reunión en la isla con el ministro de Protección Civil, Vassilis Kikilias, autoridades locales y científicos.

La isla volcánica, un destacado destino turístico, fue puesta en estado de emergencia el jueves por Protección Civil hasta el 3 de marzo para “hacer frente a las necesidades extraordinarias y gestionar las consecuencias de la actividad sísmica”. El jefe del gobierno aseguró que “todo el dispositivo del Estado está movilizado” y que el gobierno y los científicos continúan “monitoreando este fenómeno geológico activo”.

Instando nuevamente a los habitantes a “mantener la calma”, Mitsotakis afirmó que se llevan a cabo medidas de prevención y control de los edificios por equipos de ingenieros. Más de 50 temblores fueron registrados en las últimas doce horas, siendo el más fuerte de magnitud 4,8 a las 07H16 GMT, en el mar y a 2 km de profundidad, según el Observatorio de Atenas.

Desde el 26 de enero, más de 7.700 temblores sacudieron la zona de Santorini, en el mar Egeo. El más intenso fue de 5,2, el jueves por la mañana, según el laboratorio de sismología de la Universidad de Atenas. Más de 11.000 habitantes y trabajadores temporales dejaron Santorini desde el domingo, por vía marítima y aérea. En 2023, la isla, que cuenta apenas 15.000 habitantes, recibió 3,4 millones de turistas.

Kostas Papazachos, profesor de sismología, advirtió que “los temblores continuarán durante dos o tres semanas”. Y agregó: “Habrá una secuencia de réplicas que disminuirá lentamente”. De igual manera subrayó que el epicentro se desplazó hacia la cercana isla de Amorgós, también muy turística.

Sin miedo

A pesar de los repetidos sismos que obligaron a miles de personas a abandonar la isla turística de Santorini, en Grecia, Chantal Metakides decidió, al igual que otros habitantes, quedarse en su hogar en los acantilados. Desde la terraza de su amplia casa blanca, esta belga, que vive en la isla volcánica de las Cícladas desde hace 27 años, tiene una magnífica vista de toda la caldera, nacida de una erupción volcánica alrededor del año 1600 a.C.

Más de 7.000 personas abandonaron Santorini por mar o por aire desde el domingo debido a las numerosas réplicas sísmicas, una secuencia sin precedentes en esta zona desde el comienzo de las mediciones en 1964, según datos del Instituto de Geodinámica del Observatorio de Atenas.

“La mayor parte de la casa data de 1720″, explicó Metakides mientras el viento barre las calles desiertas del pueblo blanco y azul de Fira, ubicado en la cima del acantilado rojo y uno de los más visitados por turistas de todo el mundo. “La casa soportó terremotos y erupciones volcánicas. No hay razón para que eso cambie. No tengo miedo”, agregó Metakides, que alquila  habitaciones de alta gama con vistas al mar Egeo.

Por su parte, Panagiotis Hatzigeorgiu mostró la misma seguridad. “¡No tenemos miedo!”, exclamó este empleado municipal, de 65 años de edad. Santorini tiene aproximadamente 15.500 residentes permanentes y muchos trabajadores temporales en el sector hotelero, de restauración o en la construcción para recibir a más de 3 millones de turistas cada año.

Aunque la frecuencia de los terremotos disminuyó el miércoles, aún se registran “al menos una veintena al día, pero no muy fuertes”, comentó Metakides. Todas las escuelas están cerradas hasta este viernes y los encuentros están prohibidos.

Santorini tiembla con frecuencia porque es parte del arco volcánico del Egeo, una región altamente sísmica debido a la subducción de la placa africana bajo la placa euroasiática. Esta actividad genera terremotos y alimenta el volcán de Santorini, que sigue activo.