La incursión de marcas chinas en el mercado automotriz europeo es un fenómeno que ha impulsado a diferentes fabricantes a presionar para que la Unión Europea replantee la restricción a la venta de vehículos a combustión a partir de 2035, tal y como lo habían acordado en años anteriores.


Ahora, la Comisión Europea parece haber escuchado la petición impulsada por Italia y Alemania, y ha planteado la posibilidad de permitir que se sigan vendiendo carros con motores a gasolina, incluso después de la fecha planteada.
Ante esto, la compañía china BYD, firma que lidera la venta de carros eléctricos en el mundo y una de las que ha incursionado con fuerza en el territorio europeo, ha reaccionado al movimiento del viejo continente.
Stella Li, Vicepresidenta de BYD, se refirió al tema y dejó claro que la poderosa firma no verá alterados sus planes, pues dentro de su estrategia siempre ha primado el desarrollo de la electrificación.
“No nos importan las revisiones del Pacto Verde ni retrasar la prohibición de los coches de combustión. Podemos usar el DM-i para sustituir los motores de combustión interna con un rendimiento mucho mejor, un consumo de combustible mucho menor y tecnología inteligente. Nuestra estrategia, desde los coches pequeños hasta los grandes, es ofrecer vehículos eléctricos y DM-i”, aclaró la ejecutiva en una rueda de prensa celebrada en Londres.
Esta decisión podría alterar los planes de la marca, pues se estima que tendría planes de hibridación para complementar su desarrollo eléctrico, y luego dar el salto definitivo a esta última tecnología a partir de 2035.


Sin embargo, si la Unión Europea concede esta flexibilización, BYD podrá seguir adelante con la implementación de ambas tecnologías, pues estaría cumpliendo con la meta del 10 % de emisiones que estipulan las nuevas reglas para la industria automotriz.
Aunque aparentemente no hay cambios drásticos en la estrategia de BYD para Europa, Li sí dejó claro que es necesario tener un panorama claro que le permita a las compañías tener planes estables y de esta manera evitar la incertidumbre que termina afectando a la industria.
“La Unión Europea está intentando impulsar el ‘Pacto Verde’ de un lado a otro y para muchas empresas automotrices, la investigación y el desarrollo es un proceso de vaivén”, dijo la ejecutiva de la firma china.
De igual forma, planteó que con esta nueva flexibilización, la competencia con BYD no estaría en igualdad de condiciones, pues los planes de la gigante asiática han estado enfocados plenamente en la electrificación.
“¿Cómo pueden competir con una empresa [como BYD] que solo cree en una dirección? Durante los últimos casi 30 años, nuestro sueño siempre fue la electrificación. Invertimos todo el dinero en una sola dirección”, dijo Li.
Cabe señalar que los eléctricos de BYD en Europa han ido incrementando sus ventas a un ritmo paulatino; sin embargo, la incorporación de modelos híbridos enchufables a su portafolio ha sido lo que ha permitido un impulso mucho más potente de la compañía en el viejo continente.


“¿Quién va ganando? Se oye a muchas empresas tradicionales decir que nuestro futuro producto será un vehículo eléctrico. Ahora podrían decir que quizá tengamos otra opción. Pero sus gastos de I+D deben dividirse en dos; nunca se tiene suficiente dinero para eso y nunca se domina una sola área”, concluyó la experta.








