Cambió un Tesla por un BYD: mujer reveló cuánto dinero perdió y qué es lo que más le gusta de cada marca

El mercado de los vehículos eléctricos tiene dos protagonistas: Tesla y BYD, marcas que dominan las ventas a nivel global y que se han caracterizado por su constante innovación en esta industria.

Por el lado de la firma china, su domino ha ido escalando en Europa al mismo tiempo que las ventas de la compañía de Elon Musk caen en picada en el viejo continente.

La cercanía del dueño de Tesla con el gobierno de Donald Trump ha hecho pensar a varios de los clientes de la firma de carros que el magnate está gastando más tiempo en temas políticos que en el desarrollo de su propia compañía, algo que ha perjudicado las ventas, pues a esto se le suma a que la amistad con el mandatario estadounidense divide opiniones.

Este fenómeno, al que muchos no le dan importancia, ha hecho que algunos clientes opten por cambiarse de bando y pasen de un Tesla a un BYD.

Así es el caso de Mahican Gielen, una danesa que compró un Tesla Model 3 hace tres años y que influenciada por la actitud de Musk y algunos aspectos del servicio de la compañía, optó por subirse a un BYD Sealion 7.

La mujer, que vive en Dinamarca, indicó que durante años quiso comprar un Tesla y cuando por fin lo obtuvo notó cambios en la compañía que la hicieron comenzar a dudar de la calidad de la compañía.

Empezó por cuestionar la forma como el fabricante bajó los precios de una forma absurda poco después de haber realizado la compra, afectando el valor de la reventa de su vehículo.

Sin embargo, según le explicó en una entrevista con Business Insider, lo que la llevó a tomar la decisión definitiva de pasar de la marca estadounidense a la china, fue la intervención de Musk en el gobierno de Donald Turmp, lo que a su parecer desvió el objetivo de Tesla de innovar para pasar a centrarse en temas políticos.

“Simplemente ya no quería tener más dolor de cabeza. El camino que ha tomado Musk es extremadamente frustrante. Me duele mucho porque yo apoyaba mucho a la marca. Creo que es triste para una empresa que era tan prometedora y que podría haber hecho mucho más”, explicó al medio mencionado.

A la hora de realizar el cambio, la mujer tuvo que vender su Tesla Model 3 en 22.000 dólares , un 50 % menos del valor en el que lo compró en 2022, lo que significó un duro golpe para su bolsillo.

Ahora, con un BYD Sealion 7 en su garaje, se atrevió a comparar qué fue lo que más le gustó de su reciente adquisición.

Lo primero que destacó fue la calidad de los materiales empleados por BYD, marca a la que comparó con Mercedes-Benz; así mismo, el diseño de los autos y los botones físicos también le permitieron tener una mejor experiencia.

A la hora de hablar del software, Gielen fue mucho más amable con Tesla y aseguró que en el carro americano la interacción era mucho más amable, pero que las virtudes de BYD saltaban a la vista en otros aspectos.

“Siempre le digo a la gente que el Tesla parecía un coche de juguete comparado con este, porque siempre traqueteaba”, dijo la mujer entrevistadas.

¿Qué extraña de Tesla?

La conductora danesa no fue del todo negativa con Tesla, pues también confirmó que hay funciones que encontró en el Model 3 y que no ha podido disfrutar en el BYD.

Una de ellas es la opción de desbloquear su vehículo portando el celular en el bolsillo o colocándolo encima del carro, algo que en su nuevo BYD solo se puede hacer oprimiendo alguno de los botones del control.

“En el BYD, me costó mucho acostumbrarme a pulsar el botón de la llave para bloquear y desbloquear”, explicó.

A la hora de cargar el vehículo, explica que extraña que la tapa para el puerto de carga se abra y se cierre de manera automática, algo en en el BYD no ocurre. Sin embargo, lo que más extrañará, según explicó, es la función de descongelar las ventanas en invierno, pues asegura que con su nuevo carro tendrá que quitar el hielo de forma manual.

“Así no tuve que quitar el hielo durante los últimos años. Ahora no es un problema, pero sé que será molesto en invierno”, añadió.