Vehículos
Marca de vehículos eléctricos no aguantó y se declaró en quiebra; poderosa compañía del sector ya compró su planta
La empresa dedicada a la producción de camiones eléctricos y a hidrógeno puso en venta su planta en Estados Unidos y una firma norteamericana compró su planta en Arizona.

La dinámica comercial en Estados Unidos ha llevado a que una de las marcas de carros eléctricos más prestigiosas de ese país haya tomado una decisión, aprovechando el mal momento por el que atraviesa otra compañía del sector
Se trata de Lucid Motors, firma reconocida por sus modelos de vehículos eléctricos y la cual cuenta con una gran reputación en Estados Unidos, pues algunos expertos se han atrevido a calificarla como la empresa que produce “los mejores eléctricos del mundo”.
Justamente esta marca, que produce y ensambla sus vehículos en California, Estados Unidos, ha visto una gran oportunidad tras conocerse que Nikola, productor de camiones eléctricos, se ha declarado en bancarrota en los últimos días.

Aunque es una noticia lamentable para esta compañía, la cual tiene una planta en Arizona, Lucid ha encontrado allí la oportunidad para expandir su operación y aumentar la producción de sus dos vehículos cero emisiones, los cuales han sido un éxito en ventas en Estados Unidos.
En este sentido, la posibilidad de adquirir esta planta, garantizar los empleos de más de 300 personas y ampliar su patrimonio como empresa tomó mucha fuerza, debido a que la demanda de sus autos aumenta a medida que siguen recibiendo excelentes recomendaciones.
De hecho, se ha confirmado que Lucid Motors cerró un negocio que le permite adquirir las instalaciones físicas y algunos bienes seleccionados que eran utilizados por Nikola para la producción de sus camiones eléctricos y de hidrógeno.
La información que se ha conocido es que el trato entre ambas compañías no incluye la venta de tecnología ni la cesión de parte de su inventario de camiones a hidrógeno, pues en el negocio se incluirá la planta en Arizona y los activos que no fueron incluidos en su declaración de bancarrota.

De igual forma, los 300 empleados que tenía Nikola, podrán seguir trabajando para Lucid Motors, realizando labores que se concentren en el mantenimiento de las instalaciones, mientras se definen los roles y cómo será la operación de ahora en adelante.
Esta jugada económica no solo beneficia a Lucid Motors, sino también a los empresarios al frente de Nikola, pues aunque la compañía va camino a desaparecer, aún tiene compromisos con algunos inversionistas y con sus clientes, los cuales podrán recibir la atención necesaria para sus camiones a hidrógeno o eléctricos.
Aunque aún no es claro cuál será el uso que Lucid Motors le dará a la planta en Arizona, hay rumores que apuntan a que la empleará para producir algunos componentes o materiales que ayuden a la fabricación del Lucid Air o el Gravity, algo que la llevaría a no tener que importar piezas, colocándose en sintonía con las intensiones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que ha desatado una guerra comercial buscando que los fabricantes de autos lleven sus plantas a su país.

Por el momento, Lucid seguirá diseñando y fabricando sus carros en su país, pero no hay que apartarse de sus proyectos, los cuales apuntan a llevar sus carros a mercados ubicados en otras latitudes, especialmente a Europa, continente donde tiene muy poca presencia, pues sus negocios se reducen a algunas ventas en Alemania, donde el Lucid Air ya rueda por las calles de ese país.