Vehículos
Qué significan los números y letras 5W-30 o 10W-40 que vienen en los aceites para carro; elegir el equivocado, puede salir costoso
El aceite es calve para la vida del motor. Sus capacidades de lubricación y protección son esenciales para un excelente comportamiento de la máquina.


A la hora de analizar algunos componentes de un vehículo, como neumáticos, parabrisas, repuestos del sistema de combustión o algunos fluidos como refrigerantes, líquido de frenos o aceite, es calve identificar qué significan cada una de las letras, números y códigos que traen estas partes o líquidos, con el fin de que sea el indicado para el modelo del vehículo y para entender su procedencia, componentes y beneficios.
En este sentido, el aceite es uno de esos elementos que todo conductor debe conocer a fondo para brindarle un cuidado que alargue la vida útil del motor; teniendo claro esto, los diferentes proveedores ofrecen productos destinados para cierto kilometraje y con características diferentes, según el tipo de vehículo.
Y es que a la hora de elegir, la primera duda que asalta es cuando tiene que decidir entre aceites que dicen 5W-30 o 10W-40, algo que muchos desconocen y que terminan influyendo en la salud del vehículo.

Aunque puedan parecer códigos técnicos, estos números son clave para entender cómo funciona la lubricación en los motores modernos.
Lo más leído
¿Qué significa que un aceite para carro sea 5W-30 o 10W-40?
Esta combinación alfanumérica se trata de la clasificación de viscosidad, es decir, la capacidad del aceite para fluir. Cuanto más viscosa es una sustancia, más espesa es y más lentamente se mueve.
En el caso de los aceites para motor, se necesita un equilibrio: que sean lo suficientemente fluidos para circular fácilmente, pero lo bastante densos para formar una película protectora entre las partes metálicas.
Esta clasificación está definida por la Sociedad de Ingenieros Automotrices (SAE) por sus siglas en inglés) y está basada en una escala estandarizada que evalúa el comportamiento del lubricante en frío y en caliente.
De acuerdo con Jesús Cano, líder técnico regional de Castrol, usualmente la referencia que aparece en los envases de aceite de motor, como SAE 5W-30 o 10W-40, se compone de dos partes, y cada parte tiene un significado sobre el comportamiento del lubricante:
Primera parte se refiere a la viscosidad en frío: este número puede ser 0W, 5W, 10W, 15W, 20W o 25W, y representa la viscosidad del aceite cuando el motor está frío y asegura que el motor este protegido al arrancar por la mañana. Cuanto más bajo es este número, más fluido será el aceite al encender el motor.
Por ejemplo, un 0W fluye más rápido que un 10W, lo que mejora la protección durante el arranque, especialmente en climas fríos o tras muchas horas de inactividad.
La letra “W”: La letra W viene del inglés Winter, que significa invierno y confirma que el primer número está asociado a comportamiento del aceite en temperaturas bajas. Esta es una señal de que el aceite está diseñado para funcionar bien incluso en condiciones frías, protegiendo el motor desde el encendido.

Segundo parte (después del guion) se refiere a la viscosidad en caliente: este número suele ser 8, 12, 16, 20, 30, 40, 50 o 60, y representa la viscosidad del aceite cuando el motor ya está caliente y funcionando a su temperatura normal.
Cuanto mayor sea este número, más espesa será el aceite en caliente. Esto puede ofrecer una película de la protección más gruesa, ideal para motores con mayor exigencia o desgaste.
¿Por qué es importante la viscosidad en frío y en caliente?
La elección correcta de la viscosidad garantiza una lubricación eficiente, reduce el desgaste del motor y optimiza el rendimiento. Por ejemplo, un aceite 5W-20 fluye más fácilmente que un 10W-30, lo que puede traducirse en un menor consumo de combustible, aunque con una película de protección más delgada.
“Revisar los números de viscosidad del aceite no es un detalle menor. Elegir el grado correcto garantiza una lubricación adecuada desde el arranque hasta el funcionamiento pleno del motor. Nuestra recomendación siempre será consultar el manual del fabricante y usar un lubricante que cumpla con las especificaciones técnicas del vehículo”, asegura el equipo técnico de Castrol Colombia.

A medida que la tecnología de los motores ha evolucionado, también lo han hecho los aceites. Los actuales, más compactos y precisos, requieren lubricantes que circulen por canales más estrechos. Por eso, viscosidades como 5W-30, 5W-20 e incluso 0W-20 se han vuelto cada vez más comunes, mientras que aceites más densos como 20W-50 son ahora menos frecuentes en vehículos nuevos.
Gracias a los aceites multigrado, ya no es necesario cambiar de tipo de lubricante entre invierno y verano como se hacía décadas atrás. Hoy, un mismo producto puede brindar protección durante todo el año.